Alonso-Rabi-Do-Carmo

Elogio de la brevedad

"Ricardo González Vigil, crítico de dilatadísima trayectoria, nos ofrece ahora un volumen de pretensión totalizadora"

El microrrelato en el Perú es una preocupación crítica relativamente reciente. Los primeros trabajos que se acercan a un subgénero que da muestras de enorme complejidad formal (su natural hibridez discursiva, dada su cercanía con el poema en prosa, el aforismo, el carnet, la fábula y otras formas narrativas breves, así como su tendencia a la parodia y su muy fluida relación con lo fantástico) datan de pocos años atrás. En todo caso, la mayoría de trabajos críticos abarcadores y de antologías peruanas sobre este tema –insisto, los más relevantes–, se han materializado en el siglo XXI.

Estas formulaciones son útiles, por supuesto, en la medida en que permiten visualizar una tradición más allá de sus géneros canónicos como el cuento o la novela, considerando que el microrrelato es una práctica que puede llevarnos a un viaje continuo desde el siglo XIX hasta la actualidad. Sirva esto para remarcar, entonces, que la presencia del microrrelato en el Perú no es casual o gratuita, sino una tradición de larga data, independientemente del grado de conciencia que tuvieran los autores al ponerlo en práctica.

Ricardo González Vigil, crítico de dilatadísima trayectoria, nos ofrece ahora un volumen de pretensión totalizadora, El microrrelato peruano. Antología general, que se abre con el Manuscrito de Huarochirí (siglo XVII) y culmina prácticamente en nuestros días, ofreciendo un amplio marco de autores y tendencias que de seguro permitirán estudios cada vez más novedosos y creativos sobre el microrrelato peruano.

González Vigil hace una puntual revisión teórica sobre el microrrelato y hacemos nuestras las cuatro características con que el crítico define el género: a) Hiperbrevedad, acaso la más obvia, resulta tener peso de ley. Descubro que “El dinosaurio” de Monterroso no ocupa más el trono de relato más breve del mundo, sino “El fantasma”, de Guillermo Samperio, título seguido de una página en blanco (ver p.32); b) Narratividad, pues la exigencia de una trama, por elíptica o implícita que sea, no es negociable bajo ninguna óptica; c) Ficcionalidad, ya que el relato debe reelaborar necesariamente datos que pueden o no ser fácticos, incluyendo cualquier reescritura y d) Escrito en prosa, no en verso (aun cuando el romance y otras formas puedan narrar) para conservar la naturaleza convencional de un texto narrativo, sin sacrificar por ello su experimentalismo (ver págs. 32-39). Esta enumeración de características básicas, vale la pena aclarar, no es de ningún modo un cerco. Se trata solo de una base conceptual a partir de la cual podrán añadirse variaciones e innovaciones narrativas. Cierro esta reseña ofreciendo algunas muestras de esta antología, quizá la más completa en su campo de las que se han acometido en nuestro país. Larga vida al microrrelato.

LOS VENADOS

  1. Ahora bien, sucede que antiguamente los venados comían carne humana.
  2. Después, cuando los venados ya eran muchos [un día] mientras bailaban una cachua diciendo: “¿Cómo haremos para comer hombres?”.
  3. Un venadito se equivocó y dijo: “¿Cómo harán los hombres para comernos?”.
  4. Al oír estas palabras, los venados se dispersaron.
  5. A partir de entonces, los venados habían de ser alimento para los hombres.

(Manuscrito de Huarochirí, p. 71).

AMANTANÍ Y TAQUILE

La isla de Amantaní es hembra.

Taquile, dicen, que es macho.

Ella simboliza la Luna; él, nuestro Padre Sol.

Amantaní es redonda, como una novia que sonríe con sus dieciocho polleras; Taquile, con su espinazo de montañas florecientes, es largo como un falo.

Un día se enamoraron. Fueron marido y mujer.

Tuvieron muchos hijos.

Somos nosotros.

(Cuento oral recopilado por Cecilia Granadino y Cronwell Jara. Informante: Isidro Huatta Cruz, p. 117).

LIBRO NOCTURNO

Escribo un libro de relatos al mismo tiempo que los leo. Tienen el aspecto de breves noticias periodísticas en torno a eventos de la ciudad, escritos en el proceso mismo en que ocurren, como si se debieran a las palabras. Pero me doy cuenta de que estas son noticias sin memoria: hechos de la vida diaria de una gente inexistente, en un registro ficticio, dictadas por un autor que desaparece en un lenguaje leído por otro.

Del libro prolijo solo me queda esta nota, la noticia de su hojarasca.

(Julio Ortega, p. 497).

AVISO CLASIFICADO

Le habían comentado lo eficaz que era usar el servicio de Avisos Clasificados. Se convenció. Valía la pena invertir. Viuda engañada iniciará mañana su venganza. Los lectores sabrían qué hacer.

(Ana María Intili, p.677).

el microrelato peruano
El microrrelato en el Perú. Antología general. Selección, prólogo y notas de Ricardo González Vigil. Lima: Ediciones Copé, 2022.

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Antología, Libro, Literatura

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