Keiko Fujimori

 

No te pierdas la videocolumna semanal de David Rivera del Aguila

Síguenos en Sudaca.pe

Facebook.com/sudacaperu.pe

Twitter.com/SudacaPeru

Linkedin.com/company/sudaca-perú

Instagram.com/sudacaperu/

Lima – Perú

#Sudaca​​​​ #LoÚltimo​​​​ #Encuentas​​​​ #Elecciones​​​​ #Elecciones2021​​​​ #Perú​​​​ #DavidRivera​​ #Disonancia​​​

Tags:

Keiko Fujimori, Pedro Castillo, Segunda vuelta

La última encuesta de CPI arroja 34.2% para Castillo y 32% para Keiko Fujimori. En los hechos, ya podemos hablar de un empate técnico. Esta medición confirma la tendencia que ya han mostrado Datum. Ipsos e IEP, con Castillo estacionado o ya cayendo (este es el dato político más significativo) y con Keiko subiendo sostenidamente.

El mayor desplome de Castillo ocurre en la costa y sierra norte, donde cae de 40.2% a 28%, y en el interior rural, donde se desploma de 61.5% a 43.6%. En el caso de Keiko, su mayor ascenso ocurre en el interior, que pasa de 17.9% a 28%, en costa y sierra norte, donde pasa de 23.2 a 36.7%, en la costa sur, que sube de 11.9 a 23.7%, en el oriente que crece de 22.2 a 38.6% y en el interior rural que se dispara de 13.8 a 23% (casi el doble).

Ello no es gratuito. Es resultado de una estrategia afinada de Keiko y de una falta de estrategia por parte de Castillo, quien parece seguir convencido de que el “modelo Frepap” -que le permitió pasar a la segunda vuelta- le alcanzará para ganar las elecciones.

Y seguramente pensará que la activación de todos los colectivos antifujimoristas -que será el principal aporte de Verónika Mendoza a su campaña- le alcanzará para crecer, sin percatarse que ya no basta con la puesta en marcha de antivotos sino que la campaña ya entró en otra dinámica.

Se equivoca Castillo de cabo a rabo. El problema para él es que está atado de manos. No puede moderarse porque esencialmente él y Cerrón son radicales y la impostura saltaría a la vista: adscribe una proclama convocada, entre otras entidades, por la Conferencia Episcopal, y al día siguiente lanza una estrategia de reforma constitucional abiertamente inconstitucional y autoritaria.

Se niega a debatir y mostrar equipos técnicos y no ceja en ello, mostrándonos el mismo talante del Castillo de la huelga magisterial del 2017, intransigente, caprichoso y beligerante. Como ocurrió en Ecuador, la derecha va a ganar gracias a los errores de la izquierda.

Castillo no es un buen candidato. Tuvo la fortuna de que la rueda de disruptivos sucesivos que hubo (Forsyth, Lescano, López Aliaga), le tocará justo a él en el momento mismo de la primera vuelta, pero en esta segunda ronda definitoria está mostrando groseramente sus limitaciones.

Tags:

Encuesta, Keiko Fujimori, Pedro Castillo

Todos los días, de lunes a viernes, Alexandra Ames, David Rivera y Paolo Benza discuten los temas más importantes del día por Debate. En nuestro episodio número 127:

Castillo se equivoca y la maquinaria mediática en su contra también empieza a hacer efecto. ¿Fujimori ya está en Palacio o queda mucho pan por rebanar?

En Soundcloud:

En Spotify:

Síguenos en Sudaca.pe

Facebook.com/sudacaperu.pe

Twitter.com/SudacaPeru

Linkedin.com/company/sudaca-perú

Instagram.com/sudacaperu/

Lima – Perú

#Sudaca​​​​ #LoÚltimo​​​​ #Encuentas​​​​ #Elecciones​​​​ #Elecciones2021​​​​ #Perú​​​​ #AlexandraAmes​​ #Debate

Tags:

Encuesta, Keiko Fujimori, Pedro Castillo
[CAJA NEGRA] Se acorta la brecha entre Castillo y Fujimori. Desafíos pendientes para ambos
 

Mira la videocolumna de Alexandra Ames 👇

Síguenos en Sudaca.pe

Facebook.com/sudacaperu.pe

Twitter.com/SudacaPeru

Linkedin.com/company/sudaca-perú

Instagram.com/sudacaperu/

Lima – Perú

#Sudaca​​​​ #LoÚltimo​​​​ #Encuentas​​​​ #Elecciones​​​​ #Elecciones2021​​​​ #Perú​​​​ #AlexandraAmes​​ #CajaNegra

Tags:

Encuestas, Keiko Fujimori, Pedro Castillo

La encuesta del IEP publicada hoy, la encuestadora que más generosa había sido con Castillo en su primera medición post primera vuelta (la tercera semana de abril le otorgó una ventaja de 20 puntos), hoy revela que la distancia se ha acortado a apenas 6.2 puntos; en la práctica, considerando el margen de error, casi un empate técnico.

Castillo se desploma. Cae 5.3 puntos, revelando una tendencia que coincide con otra de una encuesta privada seria. El puntero empieza a perder adeptos. En cambio, Keiko Fujimori sube nada menos que 8.5 puntos, manteniendo la tendencia que el resto de encuestadoras le asignan.

Sin duda, el parteaguas ha sido el debate de Chota. Por eso, Castillo se corre de tener otro encuentro de ese tipo porque sabe que las tendencias lo muestran como probable perdedor. Es por sus propios errores que está regalándole el triunfo a Keiko Fujimori.

La candidata de Fuerza Popular sigue un libreto muy eficaz y lo sigue al pie de la letra. Primero, se planteó la ecuación “peruanos versus el comunismo” como un modo eficaz de contrarrestar el “pobres versus ricos” propuesto inicialmente por su rival. Le ha resultado con creces. Ha recapturado el sector derechista, que es mayoritario en el país. Por más que los “genios publicitarios” aconsejen cambiar de guión, no se mueve lo que ha demostrado funcionar y falta aún cosechar en ese bolsón derechista o centroderechista indeciso.

Luego, sobre ese mantel se ha empezado a servir un buffet de ofertas, algunas de ellas populistas (canon directo, duplicación de Pensión 65, bono Covid, etc.) dirigido al aún refractario D y E. En ese esfuerzo está.

Y para conquistar el antivoto aún tiene tarea por desarrollar. Se impone un compromiso con la Patria o algo así, más extensivo e inclusivo que el promovido por la Conferencia Episcopal, que la verdad es que resulta demasiado laxo. Y si a ello le suma la convocatoria paulatina de personalidades no fujimoristas, tipo Luis Carranza, podrá atacar ese gran segmento, que es el fuerte antivoto, hoy exacerbado por la maquinaria mendocista prestada a su adversario.

Castillo no tiene estrategia. Va de tumbo en tumbo, yéndose de boca (ese desafío miserable a debatir en el penal de Santa Mónica le va a costar puntos), un día es moderado, al día siguiente lanza arengas radicales, rehúye los debates y la presentación de su equipo técnico, etc. A este paso, en Perú va a pasar como en Ecuador, donde Lasso ganó más que por sus méritos, por los errores del candidato correísta.

Tags:

Encuesta, IEP, Keiko Fujimori, Pedro Castillo

Todos los días, de lunes a viernes, Alexandra Ames, David Rivera y Paolo Benza discuten los temas más importantes del día por Debate. En nuestro episodio número 126: La última encuesta de Datum marca el inicio del camino esperado: la distancia entre Castillo y Keiko se acorta. ¿Habrá final ajustada o le alcanzará al profesor el tapón del antifujimorismo?

En Soundcloud:

En Spotify:

Síguenos en Sudaca.pe
Facebook.com/sudacaperu.pe
Twitter.com/SudacaPeru
Linkedin.com/company/sudaca-perú
Instagram.com/sudacaperu/

Lima – Perú

#Sudaca​​​​​ #LoÚltimo​​​​​ #Encuentas​​​​​ #Elecciones​​​​​ #Elecciones2021​​​​​ #Perú​​​​​ #DavidRivera​​​ #Debate

 

Lima – Perú

#Sudaca​​​​​ #LoÚltimo​​​​​ #Encuentas​​​​​ #Elecciones​​​​​ #Elecciones2021​​​​​ #Perú​​​​​ #DavidRivera​​​ #Debate​

Tags:

Elecciones 2021, Encuesta, Keiko Fujimori, Pedro Castillo

Corroborando lo que venimos diciendo desde hace semanas, la diferencia inicial entre Pedro Castillo y Keiko Fujimori se ha ido reduciendo paulatinamente. De acuerdo a la última encuesta de Datum, ésta pasó de 41-26% (15 puntos) el 22 de abril, a 44-34% (10 puntos) el 30 de abril, y ahora se reduce a 5 puntos (41-36%).

El punto de quiebre claro parece haber sido, sin duda, el debate de Chota, que los keikistas consideran en la interna una “gesta” por las circunstancias adversas en las que se libró, y que ello le habría otorgado a Keiko la imagen de arrojo y valentía necesaria para proyectar un talante presidencial.

Keiko sube en casi todos los segmentos en que se divide la encuesta (hombres, mujeres, edades 18-24, 25-34, 35-44, 45-54, Norte, Centro, Sur, Oriente, A/B, C y D (solo cae un punto en el E y dos puntos en Lima). En cambio, Castillo cae en todos, menos en el Norte que crece 3 puntos.

De hecho, el parteaguas ha sido el debate. Según la propia encuesta de Datum, un 44% considera que Keiko Fujimori lo ganó y un 32% que lo hizo Castillo. Allí se puso en evidencia una prueba de carácter, pesando ello más que el contenido mismo del debate.

A sabiendas de las tendencias, Castillo ha intentado una jugada ansiosa con este pacto mostrenco con Juntos por el Perú, que no se sabe siquiera en qué consiste y nuevamente pone en evidencia la absoluta falta de tino y criterio político de Verónika Mendoza (con justicia bautizada como la “Lourdes Flores de la izquierda”).

Si se mantiene la tendencia de Datum, la próxima semana, aún a tres semanas de la elección, estaríamos hablando de un empate técnico entre ambos candidatos, con la ventaja para Keiko de la imagen proyectada de ir en ascenso frente a un Castillo estacionado o en plan descendente.

Está funcionando la estrategia keikista de conquistar primero el reducto derechista propio (de allí el mensaje “peruanos versus comunismo”) y empieza a rendirle frutos la inclusión de una narrativa disruptiva antiestablishment que la haga mejorar en los sectores populares. Lo que aún no se aprecia es la profusión de gestos necesarios para reducir el antivoto, considerando que en verdad lo que la presencia de los mendocistas en la campaña de Castillo le va a brindar es la facilitación de equipos publicitarios especializados en el antifujimorismo (por allí van a venir las balas de la izquierda en esta fase final).

Tags:

Datum, Encuestas, Keiko Fujimori, Pedro Castillo

El hombre desenfunda su machete y lo restriega contra el piso. Se ríe. Está un poco borracho. El sonido de la hoja es lo único que se escucha al borde del toque de queda. Lo levanta y dice: “Mire, pruébelo, pruébelo, se los voy a regalar, vea, para que no digan que en Chota somos terroristas”. Entrega el machete y se vuelve a reír. “Sírvanse, por favor, queso chotano y mote”, pide. 

 

Gilberto Vásquez Morales es hermano de Armando Vásquez Morales, candidato al Congreso en las últimas elecciones por la lista cajamarquina del ultraderechista Renovación Popular. Gilberto asegura ser miembro de una de las cuatro organizaciones de ronderos de Chota. Administra la cochera en la que Sudaca tuvo que ingresar su móvil para protegerla de los gases lacrimógenos de una gresca que no pasó a mayores. 

Todo el frontis de la cochera tiene pintados los colores del partido de Rafael López Aliaga. “Mi hermano postuló, con el 1”, dice Gilberto, quien además administra el local. “A la otra camioneta que ha venido desde Lima le he dado unos ponchos, para que no digan que somos terroristas aquí en Chota”, agrega. Y vuelve a insistir con el queso, el mote y el machete. 

Además de rondero y administrador, Vásquez Morales también trabaja en obra, según las fotos que proporciona empleando una estación topográfica. “Aquí en Chota, sí, nuestros ancestros han sido duros. Pero nosotros somos muy buena gente. Acá nadie roba, nada se pierde. Yo dejo la cochera abierta toda la noche”, insiste. Está muy preocupado en transmitir esa idea.  

¿Qué hacen los ronderos si agarran a un ladrón? “Ahí, pues, tú sabes”, dice. Luego prefiere explicar: primero a trabajar, después, si el caso lo amerita, vergüenza pública. La ciudad está ya casi en silencio. Se ha apagado desde la algarabía de la tarde. ¿Por quién va a votar, Gilberto? “Por Castillo, porque es paisano, le vamos a dar el voto”, dice. ¿Y el cartel de afuera? Ya no se ríe. Su hermano está gravemente enfermo de Covid-19. 

 

“Somos ronderos”

El ambiente en Chota, capital de distrito y provincia homónimas, estuvo cargado el último sábado. Idas y venidas en redes sociales, una organización improvisada pero funcional, y autoridades locales con mucha prensa a disposición. Pero no solo la prensa limeña se trasladó en cantidad inusual a la ciudad cajamarquina, junto a Sudaca, sino también la Policía: 460 efectivos cercaron los accesos a la plaza principal.

Por supuesto, a los estrategas fujimoristas, ya curtidos en estas lides, no se les hubiera ocurrido entrar sin portátil a territorio visitante. La de Keiko era pequeña, pero bulliciosa. Algunos llegaron en buses antiguos, otros en camionetas 4×4. Los naranjas, incluso, acondicionaron su local cerca a la plaza con gigantografías de la lideresa. 

Al espacio cercado por la Policía solo ingresaron algunos cientos de partidarios de ambos bandos. Eso equiparó la bulla, pero el fujimorismo siempre estuvo en minoría. A las afueras, un primer choque se registró alrededor de las 2:30 de la tarde. Los fujimoristas arengaban “¡no al terrorismo!”, mientras un convoy cargando un lápiz de casi dos metros intentaba cruzar la esquina que ellos ocupaban a una cuadra del debate. En la plaza, los gritos eran los de un partido de fútbol. Apenas había centímetros de distancia entre las personas. 

El debate fue un intercambio de pullas −algunas mejor, otras peor dirigidas− que mantuvieron arriba los gritos hasta la última intervención. Hubo una postal final de choque de puños −histórica, desde su nacimiento− y Keiko se subió a una camioneta blanca flanqueada por su equipo. Pedro Castillo salió de la plaza caminando entre el tumulto. Los K se cruzaron con los lápices a una cuadra de la plaza a diez para las tres de la tarde. El contingente policial tuvo que lanzar algunas bombas lacrimógenas. 

Tras dispersar a los ciudadanos, la Policía se movilizó en resguardo del convoy naranja. Fueron aplaudidos, arengados, con vehemencia desde uno de sus buses. Más allá de algunos objetos lanzados al aire, el altercado entre keikistas y castillistas se calmó. El profesor se resguardó en el local de su partido: un edificio de la calle Exequiel Montoya cuyo segundo piso sobresale sobre la vereda. Desde allí, su coordinador regional anunció que daría un mensaje. 

Decenas de personas volvieron a congregarse: simpatizantes, curiosos, periodistas, policías y, también, un grupo de mujeres con chicotes y chalecos amarillos con inscripciones en negro. “Seguridad de Bambamarca. Rondas campesinas”, decían. Pasaron los minutos y empezaron las arengas. La más repetida fue esta: “somos ronderos, y no terroristas”. 

 

Pintas y más pintas

Llegar a Chota por carretera no es fácil. La ciudad está cercada por una muralla de montañas verdes, hermosas, pero llenas de neblina y derrumbes activos. La propia Keiko demoró 30 minutos debido a uno de ellos. Pero, además, toda la carretera es un muestrario de la oferta política del país, pasada y presente. Abunda en el tramo cajamarquino la propaganda del candidato al Congreso de Podemos Perú, Guillermo Vásquez Chingo, que no agarró una curul, y de Elva Edith Julón, de Alianza para el Progreso, hija de un exalcalde suspendido por mandato de detención. 

Prevalece, además, la A del partido de César Acuña, uno de los dos chotanos que participó en esta elección. El otro, que le gana en presencia de paredes, es Pedro Castillo. El lápiz es −aunque por poco− lo más pintado en todo el recorrido. No solo en la llegada a Chota, sino en casi toda la carretera desde Lima. Chimbote, por ejemplo, está repleto de muros rojos.

Para ver la ‘ola roja’, más que a analistas políticos, quizás la mejor forma era consultarle a un transportista que no paró por la pandemia.

Castillo finalmente no salió a la ventana de su local de campaña. Reubicó su saludo a un lugar más simbólico: el Parque del Maestro, a las puertas del Centro Cultural Akunta, que tiene la imagen de un rondero en la fachada. Allí dio el pésame a los familiares de un dirigente local recién fallecido, dijo que empezaba su gira por “la [región] macro-oriente” y repitió sus dos eslóganes de campaña: “No más pobres en un país rico” y “palabra de maestro”. Luego partió hacia el distrito de Chugur. 

En el Parque del Maestro se volvió a escuchar la misma arenga, varias veces: “Somos ronderos, no terroristas”. Los seguidores de Castillo hacen referencia a la cobertura de la prensa limeña sobre los vínculos de Pedro Castillo con el Movadef, que reivindica el legado genocida de Abimael Guzmán. En Sudaca, publicamos hace dos semanas un artículo que mostraba sus reuniones con representantes de ese movimiento en Bolivia. El candidato no quiso contestar al respecto. 

La ciudad se tranquilizó con la noche. “La economía aquí recién está saliendo un poco. Van a ser dos años sin carnavales. Acá esto se llena, todos los precios se multiplican por cuatro, ahora solo los comerciantes vienen, y eso”, dice el Sr. Saavedra, el administrador del hotel Saamedi. ¿Votará por Pedro Castillo? “Como paisano, supongo, le daremos el voto”, dice. 

 

“Ya estamos hasta en Magdalena”

Poco antes del toque de queda, el local de Perú Libre vuelve a abrir sus puertas. Es una reunión de 20 partidarios del lápiz con sus coordinadores y dos congresistas elegidos para este periodo: Américo Gonza y Hamlet Echeverría. Nadie filtra quién entra y quién no. El ambiente está acondicionado con cuartos de triplay en el segundo piso y un espacio abierto al centro del primero. Un hombre se para de su silla, dice que tiene una agencia de turismo y ofrece colaborar con los pasajes para la campaña. Otro recuerda que también se necesitarán personeros, porque el fujimorismo ‘seguro va a tener para pagarlos’. El ambiente es el de una recta final en la que todos creen que pueden ganar. 

“Yo he venido desde Lima. Allá nos estamos organizando en distintos barrios y hasta ya tenemos un panel enorme frente al mercado de Magdalena, un distrito de renta media”, dice uno más. Asegura que el apoyo en la capital puede crecer. Hay aplausos, otros personajes toman la palabra. Finalmente, se la ceden al nuevo congresista Echeverría. 

Él se quita la mascarilla y se pone de pie. Es profesor de secundaria, ha estudiado un posgrado en la Vallejo, de Acuña. Ha reportado un sueldo en el sector público de S/2.500 mensuales. Obtuvo una curul porque a quien le correspondía por votos, Yanina Poveda Merecedes, murió de Covid-19. ¿Todos los maestros somos terroristas?, se pregunta Echevarría. Luego se queja: “Me duele porque yo he estado en Ayacucho en la época de Sendero”.

“Al chotano ni la mano”, dice el huayno ‘Cholo chotano’, de William Tapia. Es un refrán popular que acuñaron los chilenos durante su paso por territorio nacional, debido al nivel de hostilidad con el que fueron recibidos en esa zona de Cajamarca. La copla, sin embargo, inmediatamente responde: “Las apariencias engañan, el chotano es un hermano”. 

Al alba del domingo, Gilberto Vásquez Morales se despide sin un ápice de resaca, recordando lo dicho el día anterior. Sudaca tuvo que volver con prisa a Lima, cargando un machete como regalo. “¿Ustedes van a apoyar a Keiko?”, le preguntó el administrador de una tienda de combustible, a la mitad de una carretera cubierta por la neblina, al equipo de este medio. Aún no sabemos, ¿y usted, por quién va a votar? 

“Por Castillo, porque es de aquí. Ya es hora de que gobierne un cholo, un cholo chotano. Y ahí vamos a ver qué puede hacer, ¿no cierto? Si en Bolivia [Evo Morales] lo hizo bien. Están diciendo que los cajamarquinos somos terroristas. Nada de eso, acá eso no hay”, respondió. Ese fue el mensaje de Chota para Lima tras el debate. Valga transmitirlo.

 

Tags:

Elecciones 2021, Keiko Fujimori, Pedro Castillo

Es una buena fórmula verbal la empleada por Keiko Fujimori para expresar su diferencia respecto del cambio radical que propone Pedro Castillo. Según la última encuesta de Ipsos, 86% de la población quiere un cambio del modelo (32% radical, 54% moderado), de modo que mal puede estacionarse como una simple defensora del modelo.

Pero cualquier narrativa antiestablishment que quiera desplegar la candidata de Fuerza Popular tiene que ser respaldada por los hechos y por los gestos. Y en esa medida, poco o nada ayuda que presente un equipo técnico conformado por los rostros gastados de Carmen Lozada, Martha Moyano, Jorge Baca y Patricia Juárez!!! Eso es más de lo mismo. No es renovación. ¿No tenía a nadie más que mostrar? Si la idea era reforzar el albertismo, es un esfuerzo absurdo porque ese voto ya lo tiene consigo.

Es verdad que el antivoto keikista viene disminuyendo (de 70% en marzo a 50% en la última medición), pero si Keiko de verdad quiere aliviar esa mochila va a tener que mostrar algunos propósitos de enmienda respaldados en nombres frescos, independientes, no fujimoristas.

El de Luis Carranza es, por ejemplo, una buena muestra de lo que debe mostrar. Carranza es un economista que garantiza un manejo macroeconómico serio y fue él el artífice del boom económico del segundo gobierno de Alan García. Pero a la par se necesita conocer una baraja de potenciales Premier o, muy en particular, de probables ministros de Educación, considerando que las mayores rabias y furias keikistas de los últimos cinco años se asentaron en ese sector (teniendo como víctimas a Jaime Saavedra y Marilú Martens).

Keiko tiene el camino cuesta arriba. Debe recuperar el sector AB derechista (empeño que ya está casi logrado), debe conquistar los sectores D y E (aún en proceso), debe asegurarse algún porcentaje significativo en el arisco sur antifujimorista (lo más complicado), y debe aminorar el antivoto (tarea que parece haber olvidado).

Todo ello requiere de una estrategia fina, múltiple, de varios frentes de batalla simultáneos. Pero no puede cometer errores tan ingenuos como el del anuncio de su “equipo técnico” de la vieja guardia. Le resta, no le suma.

Tags:

Elecciones 2021, Fuerza Popular, Keiko Fujimori
Página 10 de 14 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14
x