Hay dos formas de eliminar la dispersión tremenda que existe en el segmento que va del centro a la derecha del espectro ideológico político nacional: o se adelantan las elecciones o se efectúan primarias como filtro.

El adelanto de elecciones dejaría fuera de carrera a los morosos o ineficientes que no han podido lograr la inscripción con la antelación debida, demostrando así falencias organizativas que anticiparían lo que sería un pasivo gubernativo en caso de llegar al poder (es, en esa medida, un filtro justo).

Hay algunos protocandidatos que ya tienen, inclusive, más de un lustro en el empeño y no logran la inscripción (como, en la izquierda, acontece con Verónika Mendoza). Es verdad que se necesita dinero para lograr el cometido, pero no tanto como antes, cuando se pedían centenares de miles de firmas para poder inscribirse. Hoy se requiere más punche organizativo que recursos monetarios.

De otro lado, la realización de primarias es de por sí una manera de disminuir postulantes. Está diseñado el modelo para eso, justamente, y también para democratizar la elección de los aspirantes al Congreso. Quienes no obtengan, según la norma vigente, al menos el 1.5% de los votos válidos, pues no podrán presentarse a las elecciones generales (es, inclusive, una valla baja; debió ser más alta). Pero aun así, el problema es que el Congreso, como sucedió el 2021 en las elecciones generales, y el 2022 en las subnacionales, las suspendió y ahora quiere hacer lo propio.

Por angas o por mangas, lo cierto es que si la clase política que va del centro a la derecha -sociológicamente casi el 80% del electorado-, se presenta con más de veinte candidatos, como hoy se vislumbra, va perdida a la elección y le regalará a la izquierda la posibilidad no solo de colocar un candidato en segunda vuelta sino, eventualmente, dos, lo que sería una tragedia nacional.

Todo se encamina a ello, por irresponsabilidad de los protagonistas ya inscritos y por inscribirse, que no quieren cejar en su empeño personalísimo, por un lado, y por otro, por la punible necedad de partidos como Fuerza Popular o Alianza para el Progreso, que se quieren tirar abajo las primarias una vez más, creyendo que como ellos tienen una base electoral consolidada, les conviene la dispersión.

 

Tags:

Adelanto de elecciones, Dispersión Política, Elecciones 2023, Primarias

El gobierno ha anunciado, dentro de su paquete de 25 medidas para salir de la recesión, la aceleración de los proyectos de irrigación de Chavimochic, Chinecas y Majes-Siguas.

Se ve difícil, ya lo han señalado expertos, que se logre el cometido en las fechas planteadas, pero vale destacar el esfuerzo de imprimirle voluntad de ejecución a los mismos, por su impacto en la economía nacional y en la dinámica inversora.

Al mismo tiempo, ya es hora de replantear el modelo por el que se asignan las tierras de estos proyectos, a grandes inversionistas, bajo un esquema en el que el Estado termina subsidiando a los megaterratenientes. El esquema es sencillo: el Estado invierte miles de millones de soles en poner operativos los proyectos de irrigación y como licita restrictivamente grandes extensiones de tierras, solo pueden postular dos o tres grandes inversionistas, que por esa razón, al reducirse la competencia, a la postre terminan pagando por las tierras un monto menor al que costó habilitarlas. El Estado pierde y le “regala” dinero fiscal a los grandes grupos de poder agrícolas.

Es hora de apostar por la mediana y pequeña agricultura, por generar capitalismo popular entre inversionistas de, inclusive, una hectárea. Es verdad que las grandes extensiones generan economías de escala y ello abarata los costos de producción, pero también es cierto que cuando existe una comunidad de pequeños propietarios, ellos mismos, por la propia lógica económica, terminan asociándose y replicando el esquema de la megaescala.

Ejemplos de ello no solo existen en el Perú, en algunos valles, sino también en el mundo (Países Bajos, por ejemplo), que, con pequeñas extensiones prediales, se logra índices de productividad fabulosos.

El modo en que se han manejado los grandes proyectos de irrigación, construidos con dineros públicos, forma parte de la gran historia negra del mercantilismo peruano, donde la oligarquía se ha beneficiado irregularmente de las normas para recibir beneficios económicos en desmedro del Estado, es decir de todos los peruanos.

El esfuerzo de trasvasar aguas de los ríos, de la vertiente occidental hacia nuestra desértica costa, es inmenso en trabajo y en recursos, como para que termine beneficiando a unos pocos. Estos proyectos deberían ser, más bien, una maravillosa oportunidad para generar una miríada de empresarios agrícolas, de inversionistas pequeños y medianos, que construyan un tejido social proempresarial.

Tags:

Desarrollo Económico, Mediana Agricultura, Pequeña Agricultura, Proyectos de Irrigación

Ha dado la vuelta al mundo la indigna decisión de algún dirigente de Alianza Lima de apagar las luces del estadio para, presuntamente, empañar el campeonato en su casa de la U, logrando el efecto contrario, porque ha enaltecido el triunfo, lo ha hecho memorable (de esto se hablará por décadas).

La U dio una lección de coraje, mostró la madera de la que está hecha el equipo, que, de la mano de Fossati, ha logrado representar a cabalidad el espíritu de garra que nuestra historia demanda y por eso ha logrado llevar, en promedio, cincuenta mil personas al Monumental de modo permanente.

A pesar del triunfo, nunca se burló del rival, lo respetó, como correspondía, y es por ello que crece la dimensión de la vergüenza de la decisión aliancista de cometer una indignidad que merecería sanciones severas por parte de las autoridades del fútbol, porque anoche no solo hicieron un papelón sino que pusieron en riesgo la integridad de jugadores, comando técnico y sus propios hinchas y familias que acudieron a Matute.

El matutazo produce felicidad. Evitamos el tricampeonato de Alianza, que nos empate en títulos obtenidos, dimos la vuelta en su casa una vez más, nos quitamos la mochila de diez años sin ganar un título, llegamos al Centenario con menor presión y el 7 de agosto lo celebraremos siendo campeones del fútbol peruano vigentes.

Será necesario reforzar algunas líneas, nos toca llevar dos competiciones en paralelo (el campeonato local y la Copa Libertadores), pero el espíritu esencial de este equipo, que recoge y transmite lo que al hincha crema le gusta del fútbol, la velocidad, la técnica, el empuje, la grandeza, debe mantenerse y contratarse jugadores que compartan esa filosofía institucional.

Muchas gracias al profesor Fossati que supo recomponer un equipo maltrecho y devolverle la dignidad que le correspondía, sacando lo mejor de cada jugador. Le ha dado felicidad a millones de hinchas del equipo más grande del Perú y que debe entender que solo una meta inicial ha sido lograda y ya corresponde pensar a lo grande, con la Libertadores como objetivo, como “obsesión”, como reza el hermoso cántico de la hinchada. ¡Dale U!

Tags:

Alianza Lima, apagar las luces, coraje, Dale U, matutazo

Hoy se enfrenta a una situación adversa Universitario de Deportes. Le empataron, con más suerte que mérito, en el partido inicial de la final del campeonato peruano contra su clásico rival, y hoy en la noche define en Matute en condición de visitante.

A la U, sin embargo, lo motivan estos desafíos. Están en su ADN. La U es un equipo corajudo por historia. Surgido de las canteras universitarias de San Marcos, fue un equipo que originalmente representó a las clases altas y medias versus el equipo popular, que era Alianza Lima.

Pero eso cambió desde hace décadas. La trilogía chola de la U, Lolo Fernández, Héctor Chumpitaz y el Puma Carranza, predominó sobre la vertiente de los Terry, Challe, Leguía o Chemo. Surgió la Trinchera Norte, migrando de Oriente a la popular (a diferencia de su adversario victoriano, que lo hizo de Sur a Occidente).

Alianza es salsa y callejón. La U es cumbia y asentamiento humano. Es el cholo emprendedor y emergente, ansioso de éxito, el que se identifica con los valores tradicionales de la U. A los hinchas cremas no los entusiasma lo pinturero, la cundería, sino la técnica, la velocidad, la fuerza, el empuje.

Es la modernidad popular la que lo sigue. La U es un equipo laico, civil, no se cambia de camiseta en el mes morado, no apela a la religiosidad sino a la épica, es el mejor representante, en ese sentido de la ética informal que signa el país.

Tradición y modernidad identifican al hincha crema, que hoy no podrá acudir al recinto victoriano, pero que acompañará con su sentimiento y aliento, la entrega de un equipo que, de la mano del técnico uruguayo, Jorge Fossati, ojalá logre el anhelado campeonato 27 en la cancha del rival, como ya lo hizo antes.

La garra crema, símbolo del peruano resiliente, ha sido rescatada este año, y es lo que ha permitido tribunas llenas en el Monumental, batiendo todos los récords de asistencia a un recinto deportivo en la historia del fútbol peruano. En el rescate de la tradición, quiero concluir esta columna citando un post de Walter Twanama: “No solo es una frase vieja, también su lenguaje es antiguo: del balompié peruano la máxima expresión. Nadie habla así ahora. Encima, es la letra de una polka, un género prácticamente muerto. Pero a mí me gusta oírla cantar, me alegra enormemente”.

 

Tags:

Alianza Lima, fútbol peruano, La garra crema, Universitario de Deportes

Un congreso lleno de niños y mochasueldos nos regala hoy el triste espectáculo de un congresista que se regala abiertamente a los intereses de los más grandes consumidores de gas del país.

El nuevo presidente de la Comisión de Energía y Minas viene bloqueando la ley de masificación del gas que ya había sido aprobada hace más de 5 meses por 91 congresistas a favor y solo 1 en contra.

Lo que Quiroz confiesa públicamente en el evento de una distribuidora de gas es que viene retrasando el proyecto deliberadamente, que viene coordinando en privado con la empresa y que los va a llevar para explicar su propuesta fuera de Lima en un evento del Congreso. Y en el colmo de la sinceridad, llama “nuestro presidente” al presidente de esta compañía.

Si Quiroz y sus amigos distribuidores logran su objetivo de revertir esa votación, los usuarios más humildes que consumen gas natural para cocinar en Lima financiarán a empresas que utilizan el equivalente de 3,800 balones de gas al mes.

Conozca la historia completa de la confesión sincera del congresista Segundo Quiroz en esta nueva edición de REPORTAFUR.

No hay visos de solución al conflicto israelí palestino. Los sectores radicales de ambos lados han ganado la partida y predominan sobre las voces más sensatas. Los palestinos extremistas jamás van a reconocer al Estado de Israel; los israelíes extremistas quieren expulsar a los palestinos de su territorio y adueñarse de sus tierras a como dé lugar.

No parece haber otra solución que una intervención multilateral extranjera. Difícil, porque buena parte de Occidente está ciento por ciento alineada con los intereses israelíes, a quienes consideran aliados estratégicos en la zona, pero queda claro que si algo así no ocurre este conflicto no va a parar nunca.

En el primer mes del mismo ya hay más de once mil muertos, la mayoría de ellos palestinos, y el 70% niños, mujeres y ancianos. Y no tiene cuando acabar. Netanyahu ya está, claramente, aprovechando el conflicto para recuperar capital político interno, ya que estaba sumido en una crisis sin precedentes.

La solución pasa por un cese inmediato de los bombardeos a Gaza, por volver a los acuerdos iniciales de partición del territorio, por la salida de los colonos israelíes de Cisjordania, por la eliminación de los grupos terroristas palestinos y por el reconocimiento del mundo árabe del Estado de Israel (éste debería ser el punto de negociación para que Israel se allane a detener los ataques y a devolver el territorio ocupado ilegalmente).

Si este conflicto no se soluciona, el riesgo mundial es enorme. No solo por el eventual escalamiento del mismo, sino porque más temprano que tarde el acceso a armamento nuclear será factible para las naciones árabes y si la tensión actual continúa incólume, no sería aventurado sostener que muy probablemente se emplearían en ataques a Israel, con la respuesta no solo de Israel sino de Occidente y el involucramiento reactivo de Rusia y China, que están del lado palestino.

Lo que se temió que pudiera ocasionar la guerra entre Rusia y Ucrania, podría detonarlo el conflicto Israel-Palestina. Como bien se ha dicho, es parte de la fricción mundial que se va a generar por la pérdida paulatina del poder unipolar de los Estados Unidos. La ONU tiene un papel activo que cumplir, y las potencias mundiales están llamadas a intervenir para resolver un conflicto que las partes, en su versión extrema dominante, no parecen dispuestas a querer remediar.

Tags:

Israel, Juan Carlos Tafur, palestina

Si escala la denuncia de anoche del programa Cuarto Poder, respecto de beneficios insólitos a visitantes de la casa del hermano de Dina Boluarte, Nicanor, como ha sido el caso del alcalde de Nanchoc (provincia de San Miguel, en Cajamarca), Nixon Hoyos, cuyo municipio, luego de visitar el domicilio del hermanísimo, recibió la friolera de injustificados 20 millones de soles, habiendo municipios más grandes que recibieron menor suma de dinero, nos podríamos enfrentar a una situación similar a la que agobió al régimen de Castillo cuando se descubrió su despacho paralelo en el jirón Sarratea.

Ya se sabía desde hace tiempo que el hermano de la presidenta ejercía un poder político mayor al que su condición le concedía y que, inclusive, se permitía disputarle cuotas de poder al premier Alberto Otárola, con quien no se llevaría muy bien y con quien más de un encontronazo se habría generado.

Resulta increíble, por cierto, que la primera mandataria, Dina Boluarte, no parezca haber aprendido de la experiencia reciente de su antecesor y cometa el mismo error de permitir la injerencia de personajes en la sombra, fuera del organigrama del poder, en decisiones de gobierno.

¿Podría ser causal de vacancia? Si se descubren más hechos, sí. Y al Congreso no le debiera temblar la mano y a las temerosas y miopes cúpulas empresariales no debería asustarles que eventualmente se produzca un recorte precipitado del mandato y el respectivo adelanto de elecciones.

La mediocridad del régimen es galopante y está colocando los cimientos para que el 2026 aparezca un candidato radical disruptivo. Dina Boluarte no va a remontar la pendiente del descrédito y, por lo que se ve, no le interesa hacerlo.

Un adelanto de elecciones convendrá al sector que va del centro a la derecha, porque el desprestigio del gobierno -identificado por los sectores populares como una coalición derechista- drena sus posibilidades electorales. Y, además, tendría el efecto virtuoso de reducir la baraja de candidatos que se asoman en el sector (hoy, hay al menos 21 en plan de postular), permitiendo así que alguno de ellos, o dos si fuera el caso, pasen a disputar la jornada definitoria.

Si la corrupción se enseñorea de la administración Boluarte y la toca a ella directamente, es mejor cortar por lo sano, y acabar con esta agonía de un establishment que sólo está generando una agudización de la crisis política, económica y social.

Tags:

beneficios inusuales, corrupción, Crisis política, denuncia, Dina Boluarte

Haría bien el Congreso en ya no volver a darle permisos a la presidenta Boluarte para viajar al extranjero. Las mentiras con las que ha sostenido sus viajes anteriores -todos ellos perfectamente inútiles para los intereses nacionales- la desacreditan para volver a las andadas.

Que viaje la presidenta, pero al norte, donde las obras de prevención contra el fenómeno del Niño no avanzan al paso debido, al sur, donde la gente la aborrece, pero donde, justamente por ello, es menester reconstituir la imagen presidencial.

Que se quede en Lima y se aboque a reunirse con su ministro de Economía y busque algún remedio a la crisis económica que transitamos y que radica básicamente -además de las políticas contractivas necesarias del BCR- en la ausencia de confianza del sector empresarial para invertir; que haga lo propio con su ministro del Interior, a ver si encuentra una fórmula, que no sean los populistas estados de emergencia, para aliviar la ola de crimen organizado que agobia a la ciudadanía en todo el territorio nacional; que coordine una agenda de supervisión con la ministra de Vivienda para constatar in situ qué pasa con los presupuestos destinados a la prevención del Niño y que no se gastan como es esperado.

La oposición no existe y eso parece que le da tranquilidad a la gobernante para hacer lo que le venga en gana, con absoluta impunidad. Pero viene creciendo en el hemiciclo una sensación de malestar y fastidio por lo que consideran una conducta insidiosa de Palacio. La estabilidad mediocre que se ha instalado, de la mano del Ejecutivo y del Congreso, puede romperse si esa alianza tácita entre ambos poderes se empieza a resquebrajar.

Sería bueno que algo semejante ocurra. Sin una oposición que le marque la agenda al gobierno vamos camino a una mayor crisis económica, política y social, con las imprevisibles consecuencias electorales que ello generará para el 2026. Con una oposición más beligerante, lo natural, como sucede en toda democracia que se respete, es el que gobierno sometido a exigencia, mejore, no que empeore. Ello sería una buena noticia y podría cambiar el rumbo de colisión al que vamos, a paso fijo, para los próximos comicios.

La del estribo: nunca imaginé el placer de leer a Shakespeare en su versión original. Lo acabo de hacer, con Romeo y Julieta, la tragedia acontecida en Verona, narrada, como obra de teatro, por el genio británico, gracias, una vez más, a la agenda maravillosa del Club del Libro que dirige Alonso Cueto. Entre a Patreon y allí lo encuentra. Lo recomiendo.

Tags:

alianza tácita, conducta insidiosa, Crisis económica, Dina Boluarte, viajes

Muchos expertos en seguridad están solicitando que se cree una unidad policial tipo la del GEIN -que permitió la captura de Abimael Guzmán-, para combatir el crimen organizado y el descontrol delincuencial que azota al país.

La verdad, pensábamos que ya se procedía con equipos de inteligencia al respecto y nos sorprende que algo así no suceda. La ausencia de esa estrategia bastaría para explicar por qué la policía parece actuar sólo reactivamente frente al avance de los crímenes, extorsiones y asaltos que agobian la tranquilidad cívica de los peruanos y que ya constituye, según todas las encuestas, el principal problema nacional.

A este factor hay que sumar otro, del cual se habla poco, parece un tabú mencionarlo a pesar de que los noticias abundan en hechos que lo sustentan: la enorme corrupción policial.

Ya no estamos tan solo ante la conocida y acendrada costumbre de los policías de tránsito, que por cincuenta soles soslayan cualquier infracción que un conductor pueda cometer, sino que estamos ante hechos graves de alta corrupción vínculos a la subsistencia del crimen organizado: el narcotráfico, la minería ilegal, el contrabando, la trata de personas, el trasiego de armas, el mundo de la extorsión, los robos de celulares y su venta impune, etc.

Es sabido que los comisarios piden cuotas fijas de dineros malhabidos a sus subalternos. Lo mismo sucede en las altas esferas. Y todo ello pasa, en gran medida, por recibir sobornos de los delincuentes a cambio de patentes de corso para actuar.

Si no se resuelve este problema estructural, el delito no va a amainar en el país. Mientras la policía solo realice intervenciones, en muchos casos amañadas, solo como operativos psicosociales ante los medios de comunicación para generar la impresión de que algo se está haciendo, las mafias delincuenciales seguirán actuando a su antojo y discreción.

Las esperanzas de que ello cambie no se pueden perder. Otros países, que también han sufrido el azote de la corrupción de sus fuerzas policiales, han logrado hacer reformas que han resuelto en gran medida el problema y ello ha traído como consecuencia la disminución del delito en sus calles. Hay que mirar esos ejemplos y, sobre todo, aspirar a que sobrevenga un gobierno con real voluntad política de cortar el nudo gordiano en el lugar más sensible y resistente el cambio.

Tags:

corrupción policial, crimen organizado, Seguridad en Perú, Unidad Policial Especializada
x