curiosidad

La curiosidad es cada vez más requerida por las organizaciones para enfrentar los mayores retos actuales como mejorar la retención de los empleados y la satisfacción laboral, así como la creación de lugares de trabajo más innovadores, colaborativos y productivos. Así lo revela el reciente reporte SAS Curiosity@Work.

Dicho reporte define la curiosidad como el impulso de buscar nueva información, experiencias y explorar nuevas posibilidades, destacando la importancia de este rasgo sin importar la función o nivel del empleado dentro de su organización. De acuerdo con las conclusiones del estudio, el 72% de los directivos cree que la curiosidad es una habilidad muy valiosa de los trabajadores, y el 59% está totalmente de acuerdo en que la curiosidad genera un impacto real en el negocio.

Curiosity@Work destaca cómo la curiosidad ha ganado fuerza en medio de la creciente demanda de esta cualidad. Según datos de LinkedIn, de un año a otro se registró un aumento del 158% en la actividad relacionada con publicaciones en esa red social y artículos que mencionan la curiosidad, y que compartieron con sus colegas; un crecimiento del 90% en las ofertas de empleo que la mencionan; y un crecimiento del 87% en la referencia de habilidades relacionadas con la curiosidad.

Retos para desarrollar la curiosidad

Aunque se reconoce cada vez más el valor de la curiosidad en el lugar de trabajo, muchas organizaciones aún tienen mucho que avanzar para tener una clara ventaja competitiva al aprovechar eficazmente el poder de la curiosidad como un conjunto de habilidades de sus trabajadores. Sin embargo, no todos los directivos están de acuerdo con su valor inherente y muchas organizaciones luchan por fomentarla y capitalizarla eficazmente en sus operaciones diarias.

Si bien la mayoría de los directivos encuestados cree que la curiosidad es valiosa, muchos se enfrentan a dificultades para fomentar y alentar esta peculiaridad. En realidad, el 47% admite que se siente poco o nada preparado para identificar la curiosidad en los candidatos a un puesto de trabajo. Incluso si los directivos se sienten preparados para identificar este atributo, el 47% dice que es un reto desarrollar la curiosidad en los trabajadores que no la tienen de forma natural y luchan por conectarla con el rendimiento laboral.

Estos resultados muestran una desconexión entre los beneficios percibidos de la curiosidad y el potencial de las organizaciones para aprovecharla entre los empleados. Una forma de mitigar estos retos es centrarse en las organizaciones y los directivos que tienen un alto nivel de curiosidad. Las organizaciones y los directivos que han adoptado la curiosidad suelen fomentarla dentro de la organización, incluyendo la formación y el desarrollo de la empresa, las revisiones del desempeño de los trabajadores, los criterios de promoción y la contratación, y la misión, la visión o los valores corporativos.

Tags:

curiosidad, Habilidades blandas, Trabajo
x