Claroscuro

A pocos días de conocer las películas nominadas para los premios Oscar, ya suenan algunos nombres que podrían contender por la estatuilla dorada. Uno de ellos es Passing o Claroscuro según su traducción. Opera prima de Rebecca Hall, quien se hizo conocida por su actuación en el film Vicky Cristina Barcelona de Woody Allen. La directora britanica ha realizado esta cinta en blanco y negro, con una sobresaleinte fotografia en manos del español Eduardo Grau, que ha sido producida por Netflix y está voceada para las principales categorias de la Academia. 

Rebecca Hall nos cuenta una historia de mujeres, realizada también desde la perspectiva de una mujer, que empezó siendo actriz y que no declinó de su intención de grabar en blanco y negro pese a las presiones y negativas que recibió. Importante experiencia en la actuación, con 32 películas, que le da el crédito necesario para establecer el casting y la construcción de personajes desde una profundidad completamente verosímil. 

Passing es la adaptación de la obra literaria del mismo nombre, escrita por Nella Larsen en 1929 y adaptada al guión por Hall. Cuenta la historia de dos mujeres que se reencuentran después de 12 años pretendiendo tener una vida perfecta, pero que en realidad está llena de apariencias y simulaciones. 

Este reencuentro está planteado con muchos elementos externos que nos hablan más bien de la naturaleza de ambos personajes. Irene (Tessa Thompson) sube apresurada a un taxi. Un hombre se ha desmayado sobre la vereda debido al calor extremo. Ella ha preferido mirar a la distancia la situación hasta llegar a su destino, donde podrá tomar algo para calmar su bochorno. Minutos después, de pie frente al Hotel Drayton en Nueva York, duda en ingresar.  El film que en un inicio la muestra recorriendo las calles, haciendo compras. Deja en claro que pertenece a una clase socioeconómica acomodada, por la cantidad de bolsas que lleva consigo. Sin embargo, se muestra a la defensiva con todos los que la rodean. 

Cuando finalmente ingresa al exclusivo Hotel, lo hace titubeando, limpia con polvos el sudor de su rostro. En la escena, vemos alrededor dos ancianas observando al vacío y una pareja que se susurra al oído, mientras la mirada de otra mujer la invade, ella es Clare (Ruth Negga). 

Desde este momento y hasta el final, una serie de sutilezas irán generando suficiente intriga en la relación de ambas protagonistas como para sostener una narrativa que propone un ritmo lento y un ángulo contemplativo de los sucesos. El marco de esta historia está ambientado en los años 20 ‘s. En medio del conservadurismo y racismo que incluso en la ciudad de los rascacielos imperaba. 

Irene y Clare son mulatas, la segunda ha optado por disfrazar su origen y ocultarlo a su esposo que además de blanco, es racista. La primera, en cambio, está casada con un médico afroamericano, al que no le tiene que ocultar su origen, pero vive a sobresaltos por temor a su seguridad y la de sus hijos, debido a su color. Esta es la época en donde fueron linchados alrededor de 4,400 personas por el color de su piel, sumado a que el Ku Klux Klan buscaba reestructurarse. 

Irene es Tessa Thompson, muchos la reconocerán por su papel de Valquiria en el universo de Marvel, con los Avengers. Sin embargo, la actriz americana de origen panameño, ha interpretado a personajes como Diane Nash en el film Selma, reconocida activista por los derechos civiles en el país del norte y el drama Mississippi maldito, como protagonista, en el personaje de Kari Peterson, entre otros. 

Ruth Negga hace de Clare, la prensa internacional la ve como favorita por esta interpretación para llevarse el Oscar. Anteriormente la vimos como Celeste en la cinta 12 años de esclavitud y como Mildred en Loving, que trata también del amor interracial. 

Claroscuro observa a través de los ojos de Irene, quien se ve alterada por la aparición de Clare.  Personaje que trastoca todo su mundo y lo cambia por completo. No solo su vínculo con el entorno, si no la verdadera naturaleza de la relación entre ellas. 

Un largometraje con dos protagonistas que sostienen una vida que no les genera entusiasmo y con matrimonios que perdieron hace tiempo su encanto. Un ejercicio de observación y de contención a las emociones más intensas como la atracción, los celos, el rechazo y la traición. Emociones que saben explotar con la caída de una taza, con miradas que revelan situaciones, pero que a su vez evitan enfrentar, con gestos que delatan, pero que generan dudas. Las dudas con las que desde un inicio se presentó a Irene y que llevaron a esta historia a convertirse en ambigua, contenida, sutil, desconcertante y por ratos densa. 

Acá ni el final resulta una certeza, porque todo está sujeto a conjeturas. Paradojicamente, este film tiene más de un acierto, desde el reparto, las actuaciones, los diálogos, la atmósfera, la fotografia, los encuadres, el blanco y negro  y todo aquello que subyace en la historia y nunca llegamos a confirmar. Ninguna vida es perfecta. Pero sobre todo, de ese lado de la ciudad y desde el otro, que es opuesto en su población, la infelicidad es compartida. 

 Cr: Netflix © 2021

Tags:

Claroscuro, Netflix, Passing, pelicula
x