La ocupación chilena de Lima es sin lugar a dudas uno de los episodios centrales de la Guerra del Pacífico. Se trata de un hecho rodeado de múltiples circunstancias, unas heroicas y otras, por cierto, penosas. Ver, por ejemplo, al monitor Huáscar, ya con bandera chilena, acodado frente a la capital, presto a encender sus cañones. O darse cuenta de que prácticamente no hay testimonios ni periódicos que hablen de estos años por la sencilla razón de que el ejército de ocupación se encargó de copar todos los medios de comunicación, haciendo impensable cualquier disidencia, al menos en tinta y papel.
El tiempo que dura la ocupación chilena es una suerte de nebulosa para los limeños, pero no para los lectores que en Santiago seguían con minuciosidad las noticias provenientes de Lima que publicaban diarios como El Ferrocarril. De manera que intentar rescatar esos años es una tarea muy difícil, por no decir imposible. Sin embargo, el poeta Bruno Pólack Cavassa logra atisbar algunos pasajes de este suceso en su libro La ciudad que no existe.
Pero no se trata de un libro de historia a secas. Lo que mejor define el texto de Pólack es el hecho de ser una crónica que apunta en dos direcciones muy precisas: la primera, recordar efectivamente unos hechos ocurridos durante la ocupación de Lima; la segunda establece un relato de memoria familiar, que explora en los orígenes de la propia familia del autor, orígenes que unen, como un puente, a ambos países. Hay, pues, una suerte de contrapunto en el que la narración historiográfica se relaciona con la aventura biográfica (y privada) del poeta.
En ambos relatos hay un efecto dramático, al punto de sospechar, como lector, que no hay otra forma de contarlos. Tensión, expectativa, casualidades, azar y premeditación están presentes en el tejido de este libro. Mencioné líneas arriba al Huáscar, el buque peruano más emblemático. Consumado el Combate de Angamos, el Huáscar es llevado a Chile, reparado y puesto en funciones nuevamente, esta vez al servicio de los vencedores. Ese mismo Huáscar es el que estuvo frente a las costas de Lima, ese decisivo 15 de enero de 1881, día de la Batalla de Miraflores, contribuyendo ominosamente al bombardeo de la capital.
El texto, además, se abre en distintos arcos temporales entre el siglo XIX, el XX e incluso el XXI. El avance del ejército invasor hacia Lima, la huida de familias enteras del horror de la guerra, los vaivenes de un Piérola inconsistente, la honrosa actuación de militares extranjeros en favor del Perú, una historia de amor y abandono, el recurso lúdico de unas llamadas telefónicas o el recuerdo de un combinado de futbolistas chilenos y peruanos que partió de gira a Europa a hablar su idioma de barrio, ese de oraciones de huacha y taquito.
Quizá decir que esta es una nueva manera de contar la historia sería un entusiasmo excesivo. Diría que es al revés, en todo caso, que lo que hay es una manera de apropiarse de materiales históricos para componer con ellos una crónica que no excluye, felizmente, al archivo familiar.
La ciudad que no existe. Historias de la ocupación chilena de Lima (1881-1883). Lima: Editorial Planeta, 2021.
Alonso Rabí Do Carmo es profesor ordinario de la Universidad de Lima, donde imparte cursos de Lengua, Literatura y Periodismo. Estudió Literatura en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y obtuvo el Doctorado en Literatura Latinoamericana por la Universidad de Colorado. Ejerce el periodismo desde 1989.