Camisetas de la selección peruana, polos con el Escudo Nacional, mascarillas con inscripciones de rechazo al comunismo y banderines blanquirrojos en camionetas adornan la mañana de la segunda vuelta electoral en el distrito de San Isidro, el corazón de las clases más pudientes del país. Un panorama completamente distinto al del pasado 11 de abril, que estuvo marcado, por ejemplo, por las tardanzas y las ausencias de miembros de mesa.
“Las mesas terminaron de instalarse a las 9:45 am, a diferencia de la primera vuelta en la que terminaron de abrir a las 11:45 am”, cuenta un funcionario de la ONPE desde el emblemático colegio estatal ‘Alfonso Ugarte’. La misma tendencia se da en colegios como la I.E. 1051 – El Olivar y los privados Sagrados Corazones Belén y Reina de la Paz, que lograron instalar todas las mesas antes de las 8:30 am.
Para esta ocasión, acudieron 4.000 votantes más que en la primera vuelta, en la que le dieron el respaldo al ultraconservador Rafael López Aliaga . El ausentismo se ha reducido en 13%.
Para esta mañana de domingo, San Isidro -cuna de lideresas como Lourdes Flores Nano y Madeleine Osterling- tiene como favorita a Keiko Fujimori. Sudaca se dio una vuelta por esta zona y conversó con algunos de sus pobladores a las afueras del I.E. Alfonso Ugarte:
¿El polo del Escudo del Perú lo lleva por alguna razón en particular?
Porque amo mi país, no hay más razón que eso. ¡Viva el Perú, carajo!
Entendería que su voto ha sido por…
Por Keiko, por Keiko presidenta. ¡La primera mujer presidenta!
Usted considera entonces que Keiko sería una buena opción para liderar al país.
Es la única, no es “buena”. ¡Es la única y la mejor!
¿Considerando que viene siendo investigada?
Con todas sus investigaciones. ¡Me importa un carajo! Castillo no.
La vecina, que no quiso identificarse, no se ha dado cuenta, pero acaba de parafrasear a un ilustre chotano, el “doctor” César Acuña, que dijo hace poco en apoyo a Fujimori: “Por mi país hoy depongo todo. Me olvido de los actos de corrupción”.
A la escuela también acude a votar un señor, que luce un tapabocas que dice “No al comunismo”. El hombre apunta, con resignación pero mayor sensatez, que respetará los resultados finales: «Que gane quien quiera, por mi normal, si gana Castillo, ¿qué vamos a hacer? Si el pueblo quiere que gane, que gane pues».
Cerca de las 11 de la mañana, en otro punto del distrito, el expresidente Francisco Morales Bermúdez daba unas declaraciones. Acorde con los tiempos, RPP presentó al sentenciado por su participación en el Plan Cóndor como un demócrata ejemplar de la tercera edad. “A mí me tocó, con el apoyo de las fuerzas armadas y las fuerzas policiales, me tocó tener la capacidad suficiente para volver a la democracia. Esa democracia la siento yo. Una democracia equilibrada es lo que el Perú necesita, no buscar extremos”, dijo ante una amable reportera.
El discurso de defensa por la democracia fue el más repetido entre quienes apoyaron a Fuerza Popular, a pesar de que la candidata Keiko Fujimori carga con un pedido de prisión de 30 años y 10 meses por parte de la Fiscalía. Los delitos por los cuales se le acusa: crimen organizado, lavado de activos, obstrucción a la administración de justicia, fraude en procedimiento administrativo y falsedad genérica.
“Amo a mi patria y vamos a votar por salvar la democracia. Si gana Castillo, esperemos que sea coherente, porque hasta ahora ha demostrado incoherencia. De ganar Keiko, definitivamente tendríamos mayor tranquilidad”, dice una pareja en la cola para ingresar al ‘Alfonso Ugarte’. Cuadras adelante, monjas y ciudadanos de la tercera edad fueron recibidos entre arengas democráticas y, como mandaría la lideresa naranja, “aplausos protocolares”.
Minutos después, Sudaca se dirige al Parque Combate de Abtao, a cinco cuadras del colegio. La noticia que recogemos es que un miembro de mesa ha abandonado su aula bajo la excusa de salir a almorzar. Los vecinos están fastidiados. Tienen que esperar cerca de 45 minutos para que una persona de la tercera edad se ofrezca como voluntaria. A las afueras del colegio Reina de la Paz, algunos lamentan “el resentimiento de la gente que vota por Castillo” y repiten la consigna: “No es por Keiko, sino por la democracia”. Todos llevan camisetas blanquirrojas.
A las siete de la noche es el momento del flash electoral a boca de urna. Apenas se oye el resultado, resuenan palmas y algunos fuegos artificiales en las calles del distrito. Keiko Fujimori aparece en el primer lugar con una diferencia de 0.6% sobre el candidato opositor. El margen de error es de 3%, pero eso no parece minar la algarabía. El escenario cambia tres horas más tarde.
El conteo rápido le da una victoria a Pedro Castillo con 50,2% frente a 49,8% de Keiko Fujimori. En San Isidro, sin embargo, el apoyo fue férreo: al cierre de esta edición, Keiko había logrado el 88.16% de los votos en este distrito. La lideresa se mantiene a la espera de los resultados oficiales en compañía de familiares y su equipo técnico que insisten en vestir la camiseta de la selección peruana de fútbol, que el pasado jueves cayó goleada 3-0.