Este 7 de julio de 2025, en una mañana inesperada, en Huaca Yolanda (Valle de Chao en La Libertad), la excavación en la zona expuso un mural polícromo que es parte de un atrio y que es único en su estilo. La Dra. Ana Cecilia Mauricio, arqueóloga y profesora del Departamento de Humanidades PUCP, lideró este descubrimiento que marca un antes y un después en el estudio del periodo formativo en la costa norte del Perú. Las figuras en el mural revelan un simbolismo profundo de las antiguas culturas preincaicas.
La Dra. Mauricio destaca el valor excepcional de este mural, que nunca antes se había registrado en la región ni en el país, y subraya la urgencia de una respuesta institucional para protegerlo.
Aunque el hallazgo ha sido sorpresivo, también se produjo bajo circunstancias alarmantes, pues la zona enfrenta la amenaza constante de saqueos y el daño causado por la expansión de cultivos agrícolas, que avanza sin freno hacia este importante sitio arqueológico. La Dra. Mauricio destaca el valor excepcional de este mural, que nunca antes se había registrado en la región, y subraya la urgencia de una respuesta institucional para protegerlo.
Importancia del descubrimiento en Huaca Yolanda y su contenido
El mural policromo encontrado en la Huaca Yolanda no es solo un vestigio más: es una pieza clave para comprender a las antiguas civilizaciones de la costa norte del Perú. Según la Dra. Ana Cecilia Mauricio, quien lidera el Programa Arqueológico Ecodinámicas Tempranas de los Valles de Chao y Santa (Praet), el mural tiene características que lo hacen singular en su tipo. «Este mural de Huaca Yolanda es único: jamás se había registrado algo así en la zona, ni en el Valle de Santa ni en el Valle de Chao», comentó. La combinación de elementos decorativos como las estrellas y figuras de seres parecidos a peces, con redes de pesca, hacen de este mural una pieza de una sofisticación inesperada para su época.
Si bien recién hemos empezado a excavar, la estimación, por el estilo de diseño y decoración que tiene este mural, va entre 3 mil y 4 mil años».
Este hallazgo pertenece a un templo del periodo formativo en una época crucial para la formación de las primeras sociedades complejas en la costa norte del Perú. La Dra. Mauricio explicó que la datación, entre 3,000 y 4,000 años de antigüedad, se determinó a partir del estilo decorativo, que es característico de la época, y añadió que, aunque aún se siguen realizando estudios, la estimación de la antigüedad es clara. «Si bien recién hemos empezado a excavar, la estimación, por el estilo de diseño y decoración que tiene este mural, va entre 3 mil y 4 mil años», refiere.
El descubrimiento del mural y el papel de la PUCP
Este mural fue descubierto durante excavaciones planificadas como parte del Programa Arqueológico Ecodinámicas Tempranas, que la Dra. Mauricio lidera desde 2012. «No esperábamos encontrar algo de tal magnitud. Este mural es una sorpresa, algo que no habíamos previsto», comenta. A pesar de que el equipo de trabajo había planeado excavar en la zona afectada por huaqueo, el mural apareció de manera imprevista, lo que pone en evidencia los grandes huecos abiertos por saqueadores.
La excavación no solo tiene un valor académico, sino que también busca sensibilizar a las comunidades locales, especialmente a los habitantes del Centro Poblado de Tanguche, sobre la importancia de este patrimonio.
La investigación y preservación de este sitio se lleva a cabo con los fondos de investigación de la PUCP, y la Dra. Mauricio resalta el rol fundamental de los estudiantes y egresados de la Universidad en este proyecto. «José Guillén, uno de nuestros egresados en Arqueología, ha sido parte del proceso», añadió. Además, se enfatiza que la excavación no solo tiene un valor académico, sino que también busca sensibilizar a las comunidades locales, especialmente a los habitantes del Centro Poblado de Tanguche, sobre la importancia de este patrimonio.
Riesgos del mural y llamado a la acción
Lamentablemente, el mural descubierto en Huaca Yolanda no está exento de riesgos. La Dra. Mauricio señaló que la zona enfrenta una amenaza constante por la expansión agrícola que avanza sobre los vestigios arqueológicos, afectando la preservación del sitio. «La maquinaria pesada, como tractores, que se usa para los cultivos está dañando seriamente la huaca», afirmó. Además, la falta de señalización y la escasa protección institucional permiten que las huacas sean vulnerables a estos daños.
Necesitamos que el Ministerio de Cultura, y las autoridades regionales y municipales actúen con urgencia para proteger este patrimonio».
La Dra. Mauricio hace un llamado urgente a las autoridades locales, regionales y nacionales para que tomen medidas inmediatas. «Necesitamos que el Ministerio de Cultura, y las autoridades regionales y municipales actúen con urgencia para proteger este patrimonio», expresó. La arqueóloga resaltó que la protección de los sitios arqueológicos no es solo una responsabilidad académica, sino también una cuestión de identidad cultural y social para el Perú.
Esperamos que este sea un resultado positivo; que sea una contribución de lo que es la Arqueología PUCP, y lo que aporta a la arqueología peruana y a la arqueología en general».
Al finalizar la tarde del día del descubrimiento, la Dra. Ana Cecilia Mauricio destacó la importancia de este hallazgo como un fruto de la ardua labor de la PUCP en el ámbito de la arqueología. «Esperamos que este sea un resultado positivo; que sea una contribución de lo que es Arqueología PUCP, y lo que aporta a la arqueología peruana y a la arqueología en general», señaló. También expresó su deseo de que este hallazgo sirva de ejemplo para que las generaciones futuras de arqueólogos y ciudadanos valoren el patrimonio cultural del Perú. «Los arqueólogos peruanos tenemos una posición bastante particular en nuestra sociedad: no solamente somos académicos o científicos, también construimos una identidad a partir de nuestro trabajo», concluyó.