LA DINI VS LA PNP
Esos tres personajes son los que hoy alimentan las teorías conspirativas en Palacio. Una particular visión del mundo que, en conjunto, podría explicar el choque entre la DINI −adscrita a la Presidencia del Consejo de Ministros− y la Policía Nacional. Ambas instituciones están enfrentadas por la orden de inamovilidad de hace tres días.
La noche del 4 de abril, los integrantes del Gabinete se reunieron de emergencia tras “tomar conocimiento por información de inteligencia (de la DINI) que el 5 de abril se agudizaría y agravaría la situación de violencia en Lima y Callao”, según un comunicado de la Policía.
A las 10 de la noche de ese 4 de abril, el ministro del Interior, Alfonso Chávarry, solicitó un informe a la Oficina de Planeamiento Operativo del Comando de Asesoramiento General de la Policía sobre la pertinencia o no de decretar un toque de queda en Lima y Callao. Esta dependencia apenas opinó, de acuerdo a una fuente confiable de la PNP, que una medida así de extrema es una atribución del Ejecutivo.
La fuente policial asegura a Sudaca, además, que el alto mando nunca pidió el encierro porque ese no es su estilo de trabajo. “¿La Policía alguna vez ha pedido que la gente no use autos para frenar los robos de vehículos? Es absurdo”, dice.
Por eso, las cabezas de la Policía quedaron sorprendidas cuando vieron en el Decreto Supremo que se decretaba “la inmovilización social obligatoria” basados en el informe de la Oficina de Planeamiento. En un sector del alto mando se han sentido usados por el gobierno para legitimar una medida desproporcionada.
El primer ministro Aníbal Torres atizó el fuego al decir, en una entrevista con Blu Radio de Colombia, que los policías peruanos tienen una preparación deficiente. Después pidió disculpas, como siempre lo hace después de cada exabrupto. Así las cosas, el gobierno hace agua por todos lados.
Tags:
anibal torres,
Pedro Castillo