Sudaca conversó con el doctor Pedro Riega, decano nacional del Colegio Médico del Perú, con respecto a la polémica ley N° 32210 que le permitirá a los odontólogos realizar nuevos procedimientos quirúrgicos. Riega calificó a esta disposición como un “atentado contra la salud pública” y denunció que “se ha montado una campaña millonaria con mensajes engañosos”.
¿La ley N° 32210 fue aprobada de forma apresurada?
Totalmente. En estos dos meses, tras su aprobación, hemos dialogado con distintas bancadas y les explicamos el serio riesgo que representa el otorgar indebidamente competencias a un profesional que no las tiene porque tiene otra formación. Los odontólogos no son médicos y realizan el acto odontoestomatológico, no el acto médico. Esa ley se aprobó de manera forzada, tendenciosa y peligrosa. Es un atentado contra la salud pública.
¿Cuáles es la preparación con la que no cuentan los odontólogos para llevar a cabo los procedimientos que les permitiría esta ley?
Corresponde fundamentalmente a poder evaluar al ser humano en su conjunto de manera integral. El poder reconocer los problemas de salud de todo el organismo y poder clasificarlos, incluso según la prioridad que pueden tener en determinado momento. Esa es una característica esencial del acto médico que no lo tienen otros profesionales de la salud, específicamente los cirujanos dentistas quienes están preparados para intervenir sobre un segmento del cuerpo y no de forma completa. Por ejemplo, dentro del sistema estomatognático, un cáncer no es tratado por un cirujano dentista.
¿Qué representó la aprobación de esta ley y cuál será su alcance?
Que los odontólogos estén facultados para realizar procedimientos médicos especializados que son delicados, como los procedimientos de cirugía plástica, procedimientos estéticos, cirugía de cabeza y cuello, cirugía de nariz y procedimientos de otorrinolaringología. Sabemos que en nuestro país abunda la informalidad y existe un creciente número de odontólogos que realizan procedimientos médicos de manera clandestina. Lo que se estaría haciendo es legalizar este ejercicio de la medicina. Eso es poner en riesgo la vida de todos los peruanos. No están combatiendo el ejercicio ilegal de la medicina sino formalizándolo.
¿Cuáles son los riesgos para los pacientes?
Podrían ocurrirles distintas consecuencias y complicaciones. Desde hemorragias hasta infecciones, que el resultado finalmente no se dé como se requiere y ocurran alteraciones morfológicas y deformaciones. Incluso el no tomar en cuenta las enfermedades de fondo que puede tener un paciente puede hacer que este pierda la vida en una intervención para la cual el odontólogo no está preparado.
¿Esta ley se puede interpretar como bajar la valla a la medicina?
Sí y repercute en la falta de seguridad y calidad en la atención de salud de los pacientes.
¿Los especialistas y representantes del sector salud no fueron consultados antes de la aprobación de esta ley?
Lo extraño es eso. El Colegio Médico emitió su opinión en contra y el Ministerio de Salud también omitió una opinión contraria que incluso motivó la observación por parte del Ejecutivo a esta ley cuando se aprobó en 2023. Pero fue mantenida en hibernación y, luego de un año y medio, es puesta a discusión en el Congreso y sin mayor debate se aprueba. Eso es sumamente extraño.
¿Quiénes están detrás de esto?
Diversos medios se han comunicado conmigo preguntando sobre esta ley y una posible intervención extranjera de empresas que justamente capacitan a los odontólogos en procedimientos médicos especializados estéticos. Esta es una sospecha que debería ser objeto de una profunda investigación. Lo que nosotros pedimos es que el Congreso no vuelva a cometer una nueva precipitación rehusándose a derogar esta nefasta ley.
¿Cuál es la justificación que dan los defensores de esta ley?
Es evidente que se ha montado una campaña millonaria con mensajes engañosos por parte de quienes defienden esta ley. Lanzan mensajes completamente fuera de la realidad acusándonos querer monopolizar la salud cuando lo que exigimos es que se asegure que los pacientes reciban atención según las competencias reales de cada profesional. Además, dicen que queremos encarecer la salud, pero cuando alguien recibe una atención por alguien que no está preparado está más propenso a sufrir complicaciones que sí encarecen la atención. También mencionan que esta ley reconoce derechos laborales y eso es una falacia. Hay dos artículos que son de relleno y dicen lo mismo que establecen otras leyes.
¿Qué rol ha tenido en este caso el Colegio Odontológico del Perú?
La gran mayoría de odontólogos practica su profesión. Pero existen dirigentes y líderes que han venido orientando de una forma inadecuada iniciativas que en lugar de fortalecer la profesión odontológica están prestándose para promover el ejercicio ilegal de la medicina.
Mencionó que hay interés de empresas extranjeras, ¿lo que ofrecen estas empresas no es una preparación idónea?
Es un problema grave que exista una industria orientada a brindar clases y cursos con relación a procedimientos altamente especializados, para los cuales uno se forma siete años como médicos y cuatro o cinco como especialista, que los realizan en días. Esto es una estafa, pero se está dando y se está promoviendo por algunas empresas extranjeras.