Entonces, ¿el varonicidio existe?, mi respuesta es no. Este término absurdo ha vuelto a ser colocado por algunos abogados/as que, en mi opinión, ejercen su profesión sin ética, al no promover el principio de igualdad y no discriminación, dimensiones básicas que debe tener en cuenta toda persona que defienda los derechos humanos.
El varonicidio es una invención absurda y misógina. No tiene base para su problematización, ni es una figura jurídica. Este término solo busca enfrentar a los hombres contra las mujeres y seguir reproduciendo sociedades patriarcales.
La violencia de género es un problema estructural, un problema que amerita la lucha común de todas y todos. Esperemos algún día la cifra de feminicidios llegue a cero.