Emprende

No solo implica tener ganas y ser un apasionado. Tener una estrategia y hacerte algunas preguntas básicas te ayudarán a crear el camino.

¿Por qué fracasan los negocios? ¿En qué fallan? ¿Qué debo mejorar o en qué debo enfocarme para no caer y fracasar constantemente. La prestigiosa revista Forbes elaboró una lista donde mostró las muchas razones por las que fracasan los negocios. Desde tener problemas en la concepción de las ideas, el financiamiento o la estrategia de comercialización o promoción.

Por ello, recomendó, que los futuros empresarios se hagan una serie de interrogantes antes de treparse al bote del emprendimiento.

1. ¿Cuál es tu propuesta de valor?

Consiste en definir y explicar de manera clara por qué los consumidores requieren de tu producto o servicio. Sin una necesidad real, no existen incentivos para que los clientes paguen por tu oferta. Recuerda que muchas veces el éxito de un producto no está simplemente en la novedad del servicio, sino en el valor agregado, como, por ejemplo, un adecuado servicio de postventa. Incluso un diferencial como usar productos orgánicos para la creación de tus productos, esto puede ayudarte a capturar a un público con una necesidad, pero además con un propósito social.

2. ¿Está el producto dirigido a un mercado viable?

Recuerda que no puedes enamorarte de tu producto. Ni de tú idea de negocio. Antes debes confirmar si hay un mercado que lo requiere o si tú idea es crear un nuevo nicho. Una vez analizado el mercado, las competencias, los pro y contras, habrás dado un paso importante para seguir adelante.

3. ¿Qué distingue tu producto del de los competidores?

Ofrecer un valor agregado es -muchas veces- más valioso que la más costosa campaña de marketing y publicidad. Por ejemplo, si eres diseñador de ropa. Entiendes que vender polos en verano es necesario. Sin embargo, competencia en el rubro hay, y mucha. ¿Cómo hacer para diferenciarte? Usar algodón orgánico, unirte a diseñadores independientes y sacar una línea de ropa sostenible con estampados personalizados. Esto servirá para que tu producto vaya a un público que busca productos ecosostenibles y con consciencia ambiental. Ellos pagarán, porque lo vale.

4. ¿Cuánto capital requieres para iniciar tu negocio?

Muchos inversores y consultores te dirán que la mayoría de los negocios fracasa porque requerían mayor capital inicial del que poseían o creían que necesitaban. La recomendación es calcular cuánto capital piensas que necesitas y a esa cifra añadirle un “colchón” extra.

5. ¿Cuáles son tus fortalezas?

Analiza tus posibilidades y oportunidades. Un error común es que muchos emprendedores creen ser “todistas” y creen que dominan todas las materias del mercado. Entonces crean diversos productos, diferentes líneas y pierden el foco. Grave error. Especialízate en un rubro y sácale todo el provecho. La diversificación de productos caerá por su propio peso.

6. ¿Cuáles son tus debilidades?

Ubícalas y céntrate en tus fortalezas. Por ejemplo, si debes contratar un contador, hazlo, si es que esa no es tu especialidad. No es necesario que te encargues de un área que no dominas. Delega funciones. Confía. Y asóciate con un compañero leal y que te complemente para hacer de tus debilidades, una oportunidad para aprender y mejorar.

El retiro de AFP ahora es de S/. 17.600 y los trabajadores independientes que emiten recibos por honorarios, el monto máximo mensual de emisión para no pagar impuestos se incrementa a S/3,208.

¡Atención emprendedor! el nuevo valor de la Unidad Impositiva Tributaria (UIT) para el 2021, aprobado por el Gobierno, tendrá un valor de S/ 4.400. Durante el 2020 fue de S/. 4.300. ¿Cuáles serán los efectos de este incremento para nuestros bolsillos?

“Habrá efectos tributarios, laborales y administrativos para los contribuyentes”, explicó Víctor Zavala, gerente del Centro Legal de la Cámara de Comercio de Lima (CCL).

Pero a todo esto, ¿Qué es la UIT? es un valor referencial que tiene, principalmente, tres usos: calcular tributos, multas y como parámetro para otros temas tributarios, laborales y judiciales. El monto de la UIT lo establece el Ministerio de Economía y Finanzas y rige por todo un año calendario, es decir, hasta el 31 de diciembre del 2021.

Explicó que la UIT se emplea también para determinar el monto de los derechos de trámite en la administración pública, la aplicación de multas tributarias, administrativas y obligaciones contables. Detalló que esta variación será aplicada en el índice de referencia para la declaración y pago del Impuesto a la Renta (bases imponibles, deducciones, límites de afectación, etc.), así como Impuesto Predial, Impuesto al Patrimonio Vehicular, Impuesto de Alcabala, entre otros.

Para Jorge Carrillo, administrador y docente de Pacífico Business School, el incremento de la UIT tiene diversos efectos en las finanzas personales y familiares de los peruanos. Por ejemplo, señala que en el caso de trabajadores independientes que emiten recibos por honorarios, el monto máximo mensual de emisión para no pagar impuestos se incrementa de S/3,135 a S/3,208.

Carillo, además, señala que el tope de gastos personales para solicitar devolución de impuesto a la renta del trabajo (4ta y 5ta categoría), que es de 3 UIT, aumenta de S/12,900 a S/13,200.

Para los interesados en retirar el dinero de su AFP, el docente, explicó que el límite del retiro que hasta diciembre fue de S/17,200 ahora es de S/17,600, si la solicitud se presenta en 2021. Lo mismo ocurriría con la “devolución” de aportes a la ONP (1 UIT).

Ademá, explicó, se obtendrá un mayor subsidio para el Crédito Mivivienda, llamado “Bono del Buen Pagador”. Se pagará menos impuesto predial y de alcabala, ya que los tramos y tasas están en función de la UIT. Sin embargo, detalla, sube el costo de los procesos judiciales y otros trámites ante el Estado. También se incrementa el valor de las multas administrativas.

Por otro lado, el tope de ventas para ser considerado microempresa es de 150 UIT, por lo cual este valor sube de S/645,000 a S/660,000. Lo mismo ocurre con la pequeña empresa, cuyo tope máximo de ingresos es de 1,700 UIT, aumentando de S/7’310,000 a S/7’480,000.

¿Por qué consultar la historia de crédito debe convertirse en un hábito este 2021?

Estar informado sobre el desempeño de tu historial crediticio y las obligaciones financieras, debería ser una sana costumbre. Esto sirve para saber tu comportamiento ante las entidades bancarias y a tener más y mejores herramientas para tomar decisiones sobre los créditos que puedes tomar. Para Experian, estas son las razones por las cuales debes comenzar el año haciendo de la consulta de tu historia de crédito un hábito.

Es una herramienta personal de suma importancia. Lo primero que hay que tener en cuenta es que la historia de crédito es tu carta de presentación ante el sistema financiero. Allí se refleja tu comportamiento y hábitos de pago frente a sus obligaciones pasadas y presentes.

Esta es la información que consultan las entidades cuando haces una solicitud de crédito. Por eso, la historia de crédito es tu mejor referencia comercial, pues presenta tus relaciones con el crédito y la forma como has pagado esas obligaciones.

¿Cuáles son los beneficios?

– Reducir los trámites a la hora de presentar una solicitud de crédito ya que esta herramienta, en muchos casos, reemplaza el tener que presentar soportes sobre tu pasado crediticio, pues toda la información está condensada allí.

– La historia de crédito es el equivalente a una referencia de todas las entidades con las que tienes obligaciones crediticias, afirmando que cumples oportunamente con tus obligaciones.

– Gracias a la historia de crédito las personas aumentan sus fuentes y posibilidades de acceder a financiamiento, independientemente de sus ingresos. La historia de crédito, de hecho, genera desarrollo económico, pues permite que las personas que no cuentan con garantías reales puedan acceder a más y mejores créditos.

– ¿Y si hubiera inconsistencias? Si por algún motivo llegas a encontrar una inconsistencia en tu historia de crédito, puedes presentar una solicitud de reclamo sin necesidad de ningún intermediario.

– ¿cómo administrar adecuadamente tu historial crediticio? Recuerda que tu historia de crédito refleja qué tan fiable eres en el pago de tus obligaciones, por lo que el primer y más importante paso que debes dar en pro de mantener una sana historia crediticia es mantenerte al día en tus pagos.

Siempre es una buena idea utilizar los recursos y herramientas disponibles como los débitos automáticos y los recordatorios para ayudarte con ello. Si estás atrasado con un pago, trata de ponerte al día lo más pronto posible.

– Consulte, al menos, una vez al mes tu historial crediticio y siempre antes de solicitar un crédito. Esto es una buena costumbre y demuestra un buen comportamiento frente a las obligaciones crediticias.

Además, te permite estar en control de que la información allí contenida refleja la realidad de tu comportamiento financiero y cómo estás siendo reportado por las entidades con las que tienes una obligación.

– ¿Dónde puedo revisar mi historial crediticio? Puedes recurrir a la web de la SBS y consultar tu reporte de deuda. También puedes ingresar a aplicativos como Mi Sentinel.

Se trata de un tipo de organización jurídica con un máximo de 20 socios, y la que más crecimiento ha tenido en el último periodo.

Por Samanta Alva

Según el último informe técnico “Demografía empresarial en el Perú” por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), al 30 de septiembre de 2020, más de 78 mil empresas fueron constituidas. Estas son ahora parte del universo de más de 2,7 millones de empresas en el Perú.

Las organizaciones jurídicas que presentaron mayor número de altas fueron las personas naturales (60,3%), seguido de las sociedades anónimas (18,8%). Esta última organización jurídica fue la que presentó mayor variación positiva respecto del periodo similar del año anterior. Es decir, ahora más personas están apostando por constituir sus empresas como sociedad anónima.

¿Qué es una Sociedad Anónima?

Como explica el INEI, se trata de una “sociedad mercantil, con personería jurídica de derecho privado en la cual el capital está representado por acciones y se integra por aportes de los socios, quienes no responden personalmente por las deudas sociales”. Dentro de este tipo de organización jurídica existen dos sociedades:

  1. Sociedad Anónima Abierta: Este tipo de empresa suele tener un solo administrador, una junta directiva y un administrador socioeconómico. El número de socios mínimo es de 2 y máximo de 750.
  2. Sociedad Anónima Cerrada: Esta suele ser adoptada por los pequeños negocios en los que no existirá mayor complejidad en sus órganos administrativos. Este tipo de empresa estará conformada con un mínimo de dos y un máximo de 20 socios. Sus acciones no están inscritas en el Registro Público. Una Sociedad Anónima Cerrada cuenta con un directorio, junta de accionistas, gerencia y sub gerencia.

Constituir una Sociedad Anónima Cerrada

Para empezar con el proceso, lo recomendable es hacer la reserva de registro del nombre de la empresa.  Elegir a los gerentes generales, directores y representantes legales. Declarar explícitamente que si se desea o no contar con una junta directiva. A partir de ello se elabora la minuta de constitución que deberá ser presentada ante un notario.

En la notaría se debe presentar las actas firmadas por todos los fundadores de la empresa y sus identificaciones. Consignar y realizar los aportes, sean en dinero o bienes inmuebles. En el caso de este último aporte, se deberá insertar la escritura pública del bien. La notaría puede redactar el protocolo correspondiente a su escritura pública, con las correspondientes partes notariales que se presentarán ante la SUNARP.

Finalmente se deberá realizar la inscripción en el Registro Único de Contribuyentes. Para ello se presentan los formularios Nº 2054 y 2119, una copia de recibo de agua o teléfono con no más de dos meses de antigüedad. Luego se realiza la legalización de los libros de la empresa, y en caso cuenten con un local comercial, tramitar la licencia municipal de las instalaciones de la empresa.

Acaparar todas las decisiones o trabajar sin un propósito son acciones peligrosas para nuestro negocio. Elimina estos malos hábitos si buscas emprender.

Por Samanta Alva

Según el Índice de Espíritu Emprendedor desarrollado por Ipsos, el 59% de la población peruana comenzó un negocio en el pasado, y un 34% dice que no lo ha iniciado, pero lo ha considerado. Además, el mismo informe reveló que el Perú se encuentra en tercer puesto entre las 28 economías con mayor espíritu emprendedor.

Es claro que la intención de emprender es constante y creciente, pues a la vez el informe muestra que un 65% de peruanos conectados considera iniciar un nuevo negocio en los próximos dos años. En ese sentido es importante preguntarnos si estamos listos para elegir y continuar por el camino del emprendimiento.

Prepararse para emprender

Para el economista Juan Carlos Delgado, lo primero es romper con el enamoramiento a nuestra idea de negocio, traerla a tierra y considerar algunos aspectos clave como el estado del mercado del producto o servicio que ofrecemos, las soluciones que brindaremos a los posibles clientes y el equipo con el que trabajaremos.

Por otro lado, el economista conductual David Laurent ha identificado tres errores clave en los que muchos emprendedores caen y pueden llegar a destruir su propio negocio:

  • Tener miedo a errores del equipo: Cuando no confiamos en las personas con las que nos estamos relacionando para sacar adelante un negocio, buscamos ser el último filtro de todos los procesos.
  • Acaparar todas las decisiones: Esta acción es consecuencia de la anterior. Si pretendemos decidir en cada paso o proceso de la cadena de nuestro negocio, vamos a generar reprocesos. Frente a la competencia, nos pone en una muy mala posición, pues esta tendrá ventaja para avanzar y crecer en ventas mientras nos enfocamos en resolver todo en el día a día.
  • Trabajar solo por dinero: Es cierto que la función de todo negocio es generar rentabilidad, pero si no tenemos un propósito claro, no podremos enfocarnos en el valor que debemos ofrecerle a nuestros clientes ni en adaptar nuestra marca a los cambios que el mercado pida.

Finalmente procura asesorarte lo más posible en torno a todo lo vinculado a tu emprendimiento. Consulta con expertos o personas que ya tengan experiencia en el rubro al que quieres ingresar. Aprende de la experiencia de otros para que tu camino sea lo más centrado y directo posible.

Estética, organicidad y objetivos de venta son algunos puntos a tomar en cuenta para decidir la red en la cual invertir esfuerzos de generación de contenido.

Por Samanta Alva

Según la última encuesta de IPSOS sobre los hábitos y actitudes hacia Internet, los internautas en el Perú serían 13.5 millones de personas. Esto representa el 80% de personas entre los 18 y 70 años del Perú urbano. Además, una de las actividades habituales de los internautas es usar redes sociales, pues el 68% de encuestados afirma usar Internet para ello.

Es claro: probablemente gran parte de tu público se encuentre navegando en redes sociales y es allí donde puedes invertir esfuerzos para conectar con ellos. Pero, ¿cuál es la red más acertada para tu negocio?

Instagram

 

Esta plataforma cuenta con más de 1,000 millones de cuentas activas al mes, y el 90% de ellas sigue a al menos una empresa. Su audiencia crece constantemente, sobre todo entre los usuarios de 18 a 44 años, por lo que resulta una gran oportunidad para promocionar los servicios o productos que ofrece tu empresa.

Instagram se caracteriza, sobre todo por ser visual, ya que las imágenes y videos son el tipo de contenido ofrecido. Esta red puede convertirse en tu gran aliada si cuentas con material visual estético o si vendes productos físicos. Además, Instagram ayuda a dar humanidad a tu marca.

Instagram potencia el eCommerce a través de herramientas como Product Tagging o Instagram Checkout. Estas permiten que tus clientes o posibles clientes encuentren el nombre y precio de tus productos en las mismas fotos y concretar la compra en la misma red social o en tu web.

 

Tik Tok

 

A nivel mundial, TikTok alcanzó dos mil millones de descargas en febrero del año 2020. Esta red es un éxito entre los adolescentes y jóvenes: el 41% de los usuarios se encuentra dentro de un rango de edad que va de los 16 a los 24 años. En términos de mercado, se trata de un segmento de la población muy joven, que está marcando tendencias en el mundo digital, los llamados nativos digitales.

Según Noel Nuez, country manager para España y Sudamérica de TikTok, “cada usuario abre la app en torno a siete veces al día con un tiempo medio de uso de 43 minutos”. En esta plataforma se ven en promedio 1 millón de videos al día, y no se trata de contenido creado por expertos audiovisuales, sino por los mismos usuarios, ya que el fuerte de TikTok es la generación de contenido orgánico convertido en viral. Justamente aquí entran a tallar los “microinfluencers”, personas con cierta base de seguidores que pueden generar contenido orgánico y entretenido vinculado a marcas sin costos excesivos.

Finalmente, la elección de la inversión en cierta red dependerá de en dónde suele estar tu público objetivo y el tipo de producto o servicio que ofrezcas. Igualmente es importante que contemples diversificar tu contenido en distintas plataformas y alinearlo a las herramientas que cada una te ofrece.

 

Entre los retos se encuentran la conexión con el equipo de trabajo, pese a la distancia, tener clara la propuesta de valor y poner énfasis en la comercialización del producto o servicio.

Nadie imaginó que el 2020 iba a estar marcado por la incertidumbre, especialmente para los emprendedores peruanos: algunos detuvieron sus actividades, otros cambiaron de rubro y hasta 5 mil 835 empresas se dieron de baja, entre los meses de julio y septiembre, como lo indica el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI).

Ahora que estamos a puertas de iniciar un nuevo año, todo aquel que tenga un negocio debe estar preparado para enfrentar con perseverancia,  actitud  y conocimiento los retos que traiga consigo el 2021. Por ello, Giuseppe Garibotto, docente del Centro de Innovación y Desarrollo Emprendedor de la Pontificia Universidad Católica del Perú (CIDE-PUCP), comenta 4 desafíos que el emprendedor deberá enfrentar y brinda recomendaciones para superarlos con éxito.

El desafío de la comercialización: Uno de los retos principales será la comercialización de un producto o servicio, ya que con la virtualización podría ser un poco más complicado. Por ejemplo, si el emprendedor cuenta con una empresa de servicios y requiere reunirse con los clientes por videollamada, se aconseja mantener siempre la cámara encendida, ya sea que el potencial comprador también lo haga o no. Mostrarse frente a la cámara generará más confianza. En la medida de lo posible, se podría solicitar una reunión presencial, eso lo valoran muchísimo, pero recuerda siempre mantener el distanciamiento social y los protocolos de bioseguridad.

El reto de la venta: A las personas no les gusta que se les venda y que de frente se le muestre un producto. Por esa razón, se sugiere conocer primero las necesidades de la otra persona, así el emprendedor sabrá si el producto o servicio ayudará a mitigar este problema, porque si no lo tiene claro y le ofrece una solución forzada, quedará mal. Es importante tomar en cuenta que, ante la crisis generada por la pandemia, las personas son más selectivas y exigentes al escoger proveedores.

El desafío del valor diferencial: Es fundamental que el emprendedor sepa qué lo hace distinto y en qué es el mejor respecto al mercado. No necesita tener algo totalmente disruptivo, pero su negocio tiene que tener una propuesta de valor difícil de imitar; es decir, con varias barreras de entrada. Así cuando ingresen los competidores, el emprendedor estará tres pasos adelante con un servicio o producto potenciado. Ante ello, debe preguntarse ¿Qué lo hace diferente de otros? y siempre mantenerse atento y dispuesto a mejorar lo que ofrece: hay que recordar que las necesidades de las personas están cambiando constantemente.

El reto de mantener la conexión con el equipo de trabajo: Aún hay personas que siguen trabajando de forma remota, por lo que se ha perdido la parte de compartir tiempo entre compañeros, de conversar y festejar momentos como cumpleaños, aniversarios, etc. Es necesario mantener la comunicación y no solo sobre temas laborales, sino saber cómo se sienten anímicamente, conocer cómo está su familia o conocer acerca de otros temas. Por ejemplo, para sostener este vínculo se podría realizar un after office virtual para comentar sobre temas ajenos al trabajo y así poder socializar.

Puede venir de un hacker, de un cliente insatisfecho o de la reacción a una publicación que cayó mal entre los usuarios de tu marca o internautas. Lo cierto es que el contenido negativo en las redes sociales puede dañar tu reputación en cuestión de un clic.

Por Samanta Alva

Los consumidores buscan cada vez más marcas amables, responsables y con buena reputación para tener la confianza suficiente de concretar una venta. Aún más si se trata de una empresa pequeña o marca independiente. Por ejemplo, según la Asociación de Agencias de Medios, el 71% de las personas consideran que las marcas pueden realizar activismo y ser más una “fuerza del bien” que los mismos gobiernos.

Además, según un estudio de StatusLab, el 60 % de los consumidores afirma que se aleja de una marca si encuentra una mayoría de comentarios negativos y 17 % de los consumidores desconfía si no encuentra reseñas o rastro de tus compradores. En un contexto de absoluta inmediatez de comunicación en redes sociales, estas plataformas son cruciales para construir la imagen de marca de una empresa, y así como impulsarla hacia el éxito, puede condenarla al fracaso si se cometen ciertos errores que hieran su reputación.

Mantener una buena reputación

Para Shelley Pursell, especialista en marketing B2B recomienda algunos puntos a tomar en cuenta si queremos asegurar una óptima reputación con nuestros clientes y posibles clientes.

Busca reseñas de clientes reales: Cuando iniciamos un negocio muchas veces nos apoyamos en amigos y conocidos para que publiquen opiniones positivas sobre nuestros productos o servicios. Esto puede servirnos de base, pero mientras más honestas sean las reseñas, será mejor. Invita a tus nuevos clientes a dejar comentarios o compartir sus compras y experiencias en redes sociales para que puedan hacer llegar tu marca a sus contactos.

Sé claro con tu comunicación: Cuando una marca es confusa o no se puede verificar rápidamente lo que ofrece, puede alejar a los clientes potenciales. Esto incluso puede generar una mala experiencia en los clientes actuales, y esto se transformará en una mala reseña y por ende una disminución de tu reputación. Cuidar tus mensajes e identidad les dará una mejor experiencia a tus clientes e incluso inspirará confianza a quienes aún no conocen tu marca.

No tomes personales los comentarios negativos: Es imposible satisfacer a absolutamente todos y debemos tener presente que alguna vez tendremos un mensaje negativo, pero nuestra respuesta ante ello definirá todo. Toma esto como una oportunidad para mejorar la calidad de tu marca, y tu propia experiencia en manejo de crisis. Además, esto te dará la chance de enmendar la falla con algún cliente y lograr fidelizarlo.

Atención: Un jefe adicto al trabajo es una persona egoísta y no se pone en el lugar del otro. Tampoco genera empatía son sus colaboradores.

Por David Gavidia

 

Un jefe adicto al trabajo puede afectar en tu vida personal. Puede obligarte a laborar siete días a la semana, más de ocho horas al día y tener interminables coordinaciones por videollamadas, Zoom, envíos de correos electrónicos. Con plazos de entrega de productos implacables y una acumulación de trabajo desordenado, estresante y agotador.

Tener un jefe adicto al trabajo -además- significa sacrificar tiempo personal para satisfacer todas sus demandas. Para los adictos al trabajo, el trabajo es la vida y laborar bajo este tipo de presión puede conducir rápidamente al agotamiento. “No puedes cambiar a tu jefe. Ellos prosperan siendo así. Viven para el disparo de adrenalina (…) pero, como empleado, puede que tengas una familia y otras prioridades, y que no puedas trabajar las 24 horas, los 7 días de la semana”, afirma Harris Kern, autor de On Being a Workaholic: Using Balance and Discipline to Live a Better and More Efficient Life.

 

¿Qué hacer para saber llevar o evitar estos jefes que pueden resultar tóxicos en tu vida? “Encuentra una organización que esté en línea con tu visión sobre el equilibrio entre la vida laboral y la personal”, recomienda Dana Brownlee, fundadora de Professionalism Matters, una compañía de capacitación en desarrollo profesional. Pero eso es en el mundo ideal y no suele ser así.

Entonces solo queda aprender a convivir con ellos ¿Cómo sobrellevarlos? La respuesta la tiene Walter Dávila, psicólogo clínico y director de la Escuela de Desarrollo Personal Supérate.

“Un jefe adicto al trabajo es una persona egoísta y no se pone en el lugar del otro. No tiene empatía son sus colaboradores y piensa que todos deben seguir su ritmo y responder a sus llamadas, correos o WhatsApp a la hora que él lo solicite y no te deja respirar”, explica.

¿Qué debe hacer el colaborador? Debe tener en claro que la comunicación es importante y desarrollar una comunicación asertiva. El psicólogo recordó que estos temas deben conversarse en el entorno laboral. “No debes quedarte callado porqué estas reprimiendo las emociones y eso puede generar síntomas de agresión, estrés y, lo más importante, la productividad en el trabajo, por lo que debes expresar lo que sientes a tus compañeros e, incluso, con tu mismo jefe”.

Agregó: “Debes marcar límites. Hacer respetar el horario de trabajo. Hacerle recordar al jefe adicto al trabajo que existe un horario de entrada y otro de salida para respetar el equilibrio vida personal-trabajo. Todo esto con mucho respeto”, señala.

Para tener una vida equilibrada, el colaborador debe organizar su día de trabajo. Tiempo para las actividades laborales. Tiempo para tus hobbies. Tiempo para tu vida social y hacer deporte o estar con los hijos.

“Al tener varias actividades, tu vida cobra más sentido, no se hace monotonía. Tiene un sentido. Si solo vives para el trabajo y pierdes el empleo, te quedas vacío. Tu vida pierde sentido y la persona afectada puede caer en una profunda depresión”, señala Dávila.

El teletrabajo, recuerda, se ha ido adaptando a esta nueva modalidad y los colaboradores deben ser honestos. “Si están cumpliendo el horario laboral tienen que respetarlo. Si vives con tu familia habla con ellos para que respeten tu tiempo laboral. Por tu parte no excedas más horas al trabajo para que puedas atender tu hogar, tu familia, tus hobbies”, sentencia.

 

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