Es importante reconocer que en Alemania sólo un pequeño porcentaje de la población está en paro gracias a nuestro sólido sistema social. Un cierto grado de desempleo, incluido el de larga duración, es ciertamente inevitable en toda economía desarrollada. Sin embargo, en los próximos años debemos centrarnos en evitar que este porcentaje aumente, sobre todo porque los avances en IA pueden desplazar puestos de trabajo.
Para lograrlo, es crucial crear oportunidades de empleo accesibles y de entrada baja, que permitan a las personas reincorporarse a la población laboralmente activa. Una vez que hayan establecido una vida laboral estable, puede estudiarse la posibilidad de seguir formándolos y de darles entrenamientos para mejorar sus perspectivas. Este planteamiento es especialmente importante para quienes carecen de formación profesional o sólo tienen experiencia laboral no cualificada tras haber acabado la escuela.
Si abordamos estas cuestiones y prestamos un apoyo a medida, podemos contribuir a que personas con antecedentes y experiencias diversas tengan más posibilidades de éxito en un mercado laboral que está cambiando a pasos acelerados.