Dólar

En Youtube:

En Spotify:

En Soundcloud:

Síguenos en Sudaca.pe

#Sudaca​​​​ #Emprende​​​​​​​​ #Podcast​​​​ #SamantaAlva​​​​ #Coaching #Marketing #Finanzas

Tags:

Ahorros, Dólar, Finanzas personales

Todos los días, de lunes a viernes, Alexandra Ames, David Rivera y Paolo Benza discuten los temas más importantes del día por Debate. En nuestro episodio número 193: La oposición devuelve el golpe del Gabinete con la repartición de comisiones. Velarde se quedaría en el BCR. ¿Bajará pronto el dólar? Y, ¿tiene Bellido ministros preferidos?

En Youtube:

En Soundcloud:

En Spotify:

Síguenos en Sudaca.pe

Lima – Perú

#Sudaca​​​​ #LoÚltimo​​​​ #Encuestas​​​​ #Elecciones​​​​ #Elecciones2021​​​​ #Perú​​​​ #AlexandraAmes​​ #Debate

Tags:

BCP, Dólar, Guido bellido

El dólar alcanzó su punto más alto durante esta semana fijándose en S/3.9. Frente a ello, Diego Macera, gerente general del Instituto Peruano de Economía (IPE) recuerda que lo primordial es la decisión del Jurado Nacional de Elecciones, y a partir de ello empezar con nombramientos de las instituciones económicas más importantes de nuestro país, para alcanzar mayor estabilidad.

¿Cuáles son los principales retos que el próximo Gobierno deberá afrontar para la reactivación económica?

La pandemia y la economía. Esos son los dos temas gruesos que tenemos pendientes en términos de política directa que puede implementar el Gobierno. A una escala mayor está la suerte de ingobernabilidad crónica en términos políticos a los que podríamos estarnos dirigiendo a partir de lo que ha pasado en los últimos cinco años en la política peruana. El reto más amplio es una sana relación política entre los poderes del Estado.

¿Cómo ve esa posible relación de estas dos fuerzas que están tan opuestas?

Yo esperaría que lo que ha pasado en los últimos cinco años pueda servir de lección sobre lo nefasto que es mantener este tipo de tensión, la confrontación mutua, de vacancias, este uso de las llamadas “herramientas armas nucleares” que están en la Constitución. Yo espero que los últimos cinco años han servido de lección sobre lo que no se debe hacer, y que a partir del 28 de julio podamos ver posiciones mucho más moderadas, dispuestas a consensuar en todo lo que sea posible y a la vez mantenerse respetuosas a la Constitución. Por poner un ejemplo, creo que hubo demasiadas instancias en las que el Congreso anterior ha pasado normas que podían tener visos de inconstitucionalidad y en ocasiones han sido correctamente derivadas por el Ejecutivo al Tribunal Constitucional. Entonces creo que este es el ejemplo del Congreso en el que no deberíamos persistir.

Esta semana se ha hablado sobre la permanencia de Julio Velarde en el BCR ¿cómo ve esta posibilidad?

Él ha sido, sin duda, una de las personas más importantes en la economía peruana de los últimos años. Su presencia ha sumado muchísimo a la estabilidad monetaria y el liderazgo que ha tenido frente al Banco Central de Reserva. El banco es una institución muy sólida, y la expectativa es que, sea Julio u otra persona, tenga un perfil y un profesionalismo muy parecido. El BCR es de las pocas instituciones públicas peruanas que tranquilamente tienen talla mundial justamente sobre la estabilidad monetaria.

Esta semana hemos visto una baja en el dólar. ¿Se puede vincular a las declaraciones de Castillo sobre Velarde o es que se viene un proceso orgánico de estabilidad?

El 3.9, rozando los S/4 ha sido el punto máximo al que llegamos y hoy estamos a la expectativa de las siguientes decisiones que se tomarán, y aquí entran los nombramientos. Primero está la decisión final que corresponde al Jurado Nacional de Elecciones. Esa es la madre de las decisiones. Cuando ya tengamos un presidente o presidenta, harán los nombramientos tanto del Banco Central de Reserva, del Ministerio de Economía y Finanzas y la Presidencia del Consejo de Ministros. Esos son los tres nombramientos que tendrán más atención. Los diferentes agentes económicos van a empezar a sacar conclusiones o van a tratar de anticipar qué significan esos nombramientos sobre el futuro económico de los siguientes meses. En base a eso se van a tomar decisiones de inversión, algunas de corto plazo. En esas decisiones, las que primero reaccionan son las variables financieras: el dólar, el tipo de cambio y la evolución de la bolsa de valores.

¿Qué otros factores podrían ayudar a que el dólar se estabilice en el mediano plazo, es decir, hacia fines de este año?

Hay decisiones de política monetaria, algunas que dependen del Banco Central de Reserva, respecto del Sol, u otras políticas como lo que decida la FED, el banco central norteamericano. Está también el precio del cobre; si su precio se mantiene por encima de los $4 la libra. Eso normalmente ha tenido el efecto de empujar el tipo de cambio para abajo y es lo que se ha visto en estos últimos años en el Perú. Lamentablemente por la coyuntura política es que esta relación se rompió. Cuando hemos tenido el precio del cobre alto, el tipo de cambio estaba abajo. Por la coyuntura política, esta relación ya no funcionó.

Tuvimos el precio del cobre en récord al alza y el tipo de cambio también. La expectativa de mediano plazo es que si las condiciones de políticas mejoran, esto empiece a jugar a favor de la entrada de dólares en la economía a partir de las exportaciones y eso debería tener una presión a la baja del tipo de cambio. De repente no podemos volver al 3.5, pero ciertamente pueda ubicarse más bajo de lo que tenemos hoy.

Vinculado al proceso de vacunación, ¿cuáles serían los sectores más fuertes al darse una mayor reactivación de las actividades laborales?

El sector grande que concentra más gente es el sector servicios y es el sector que ha estado más golpeado en esta en esta coyuntura. Dentro del sector servicios hay diferentes actividades que han tenido comportamientos bien disímiles. Las financieras, por ejemplo, han podido mantener operaciones. Pero por otro lado tienes servicios turísticos donde el golpe ha sido muy duro. Creo que cuando uno habla de la reactivación en el sector servicios, tiene que empezar a diferenciar las dinámicas concretas de cada tipo de actividad. En el caso de turismo, es algo que posiblemente tome más tiempo estabilizarse, porque implica recibir flujos de turistas del exterior.

Hay otras actividades que con la vacunación ya empezarían a normalizarse mucho más, como el sector construcción, sector minería y sector manufactura. Hay uno muy grande que también empieza a tomar viada: el sector comercial. Esto con un avance bueno de la vacunación. Yo creo que estamos en ruta, ojalá a un rebote económico durante el 2021 de dos dígitos, es decir por encima del 10%.

 

Foto de portada: Revista Rumbo Minero.

Tags:

BCR, Diego Macera, Dólar, IPE, Julio Velarde

Nuevamente, el dólar alcanzó un precio histórico en el Perú (a las 10:00am del martes 8 de junio) al llegar a S/3,938, un incremento de 2,42% respecto a la sesión previa. Desde inicios del año, el sol se ha depreciado respecto al dólar en 7,86%.

Ante ello, el Banco Central de Reserva (BCR) vendió US$ 253 millones a un tipo de cambio promedio S/ 3.9255 por dólar para contener la alta volatilidad del tipo de cambio.

Según Bloomberg, la moneda estadounidense incrementó su cotización entre 1.50% y 2.12% en el mercado peruano en medio de la incertidumbre electoral tras las elecciones presidenciales 2021 y el ajustado conteo de votos.

Los últimos resultados de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) mostraban a Pedro Castillo (Perú Libre) con el 50.244% y a Keiko Fujimori (Fuerza Popular) con el 49.756%. En tanto se espera la llegada de los votos finales procedentes de áreas rurales y del extranjero.

Dólar al alza

Enrique Castellanos, docente de Economía de la Universidad del Pacífico, señaló que el alza del dólar responde a que “se está dando por descontado el triunfo de Castillo”.

“Mientras haya incertidumbre y no se conozca a las personas [que lo acompañarán en un eventual gobierno] ni el plan económico que aplicarán, los mercados seguirán muy nerviosos. En la medida que pongan rayas a la cancha, el panorama se estabilizará”, comentó. Mencionó, además, que la tendencia del tipo de cambio es que siga escalando.

Según el experto una posible victoria de Fujimori sería vista con un mayor optimismo por parte de los inversionistas pues durante su campaña se ha mostrado a favor de mantener el modelo económico peruano. Sin embargo, el mercado se mantendrá expectante al conteo oficial de votos ante la estrechez de distancia que separa a ambos contendores.

Por otro lado, Apoyo Consultoría señaló que el precio del dólar podría llegar a S/ 4.50 para fines de año. Frente a ello el Scotiabank considera que en el corto plazo la incertidumbre viene siendo ya absorbida por el mercado cambiario con las alzas.

Cabe señalar que, expertos en finanzas como Jorge Carrillo o el economista Carlos Parodi han señalado que la volatibilidad del billete verde continuará, sea cual sea el resultado. Han coincidido en señalar que, una posible estabilidad del dólar recién se concretaría -una vez se tenga un ganador- cuando el presidente o presidenta electa elijan a su ministro de Economía, garantice la independencia del Banco Central de Reserva y se promuevas las inversiones.

Tags:

BCP, Dólar, Pedro Castillo

 

Reporte Mensual de Fondos Mutuos Mayo 2021, de la Asociación de Administradoras de Fondos Mutuos del Perú. Infografía: Leyla López

El reporte de la asociación indica que el desempeño de mayo estuvo marcado por la coyuntura local y las expectativas de los inversionistas respecto al posible ganador de la elección presidencial. 

“Gran parte de ese dinero, según las divisiones de los bancos, que son los administradores más grandes, se cambió de soles a dólares y muchos de estos se enviaron afuera. En mayo [el retiro de fondos mutuos] se ha acentuado y lo vemos en el tipo de cambio. Hubo días en que el Banco Central de Reserva [BCR] tuvo que vender muchos dólares o intervenir con ‘forwards’ [operaciones de política monetaria para aliviar la subida del tipo de cambio]. Eso es bastante demanda, y no solo de compañías, sino también de inversionistas chiquitos”, explica Rojas. 

Movimientos como estos parecen haber asustado a los directivos de bancos como el BBVA Perú, que ayer cubrió con paneles protectores las fachadas de 35 oficinas a nivel nacional. El mensaje de temor se concentró principalmente en el centro y sur del país: las ciudades con agencias que colocaron la protección son Lima, Arequipa, Madre de Dios, Puno, Juliaca, Tacna, Ayacucho, Pasco y Moquegua, según detalló a Sudaca la oficina de prensa del banco. 

“Se trata de una medida preventiva de protección a nuestros empleados y clientes en algunas zonas sensibles donde en otras ocasiones las oficinas bancarias se han visto afectadas por hechos relacionados a protestas o manifestaciones. Son 35 oficinas de 320 a nivel nacional. Las oficinas atenderán con normalidad el lunes, pero se debe dar seguridad a los empleados o clientes por si se presenta algún disturbio. Más de 280 oficinas bancarias no tienen esa protección. Con disturbios, nos referimos a marchas”, explicaron. 

Refugiados en el dólar

También ha habido un claro movimiento hacia la divisa de refugio por excelencia. De acuerdo a las cifras del Banco Central de Reserva (BCR), entre marzo y abril de este año, los depósitos en soles del sistema financiero peruano han caído entre 1.5% (depósitos a plazos) y 6.4% (dinero de libre disponibilidad), y las cuentas en dólares se incrementaron entre 5.5% y 5.8%, respectivamente frente a marzo. Pero aún más: S/4.709 millones -su equivalente en moneda nacional o extranjera- han sido retirados del sistema. 

Hugo Perea, economista jefe para el Perú del BBVA Research, explica que lo usual en un proceso electoral es que personas y empresas opten por dolarizar sus portafolios de manera preventiva, pero que la incertidumbre ahora ha sido más alta de lo común. “Mi impresión es que en este proceso electoral la dolarización ha sido más acentuada. Creo que es básicamente una demanda vinculada a un factor precautorio”, comenta. 

Perea segura que las cifras de mayo -que aún no han sido publicadas- reflejarán la misma tendencia, sobre todo por el lado de las personas naturales, ya que las empresas se han movido primero porque suelen ser más rápidas. Por el lado de las personas, recordó que esta vez algunos han podido acceder al 100% de sus cuentas CTS, que tradicionalmente han estado en soles. y podrían haber hecho la conversión a dólares.  

Si la tendencia se acentúa después de las elecciones, el economista consideró que el sistema financiero tiene suficiente liquidez para afrontarlo. “Ante la eventualidad de que las cosas sean más complicadas, el BCR también tiene herramientas para proporcionar apoyo transitorio de liquidez en dólares. Tiene disponibilidad de reservas internacionales, más de US$7 mil millones, por ese lado creo que hay un cierto “colchón” que va a permitir enfrentar episodios de volatilidad intensos”, afirmó.

Para Rojas, existe un segmento de la población que siempre confía más en el dólar y ante la incertidumbre hay un efecto de contagio. “La gente se desespera pensando que ya perdió su oportunidad y creo que hay esa sensación de contagio donde lo poco que tengo lo mando a dólares. Hay un tema de emoción en este momento en el que todos estamos muy sensibles y que te incentiva a tomar decisiones emocionales”, afirma. 

De momento, el nerviosismo ha servido para multiplicar las operaciones en las casas de cambio digitales. Según Matías Maciel, Co-Founder & CFO de Rextie, entre abril y mayo su ritmo de captación de nuevos clientes se duplicó. 

“En estos contextos de volatilidad el precio es como un llamado a operar porque el que cree que está caro, vende, el que cree que va a seguir subiendo, compra. Las personas, normalmente, operaban un monto promedio de US$1.000 a US$1.200 dólares por operación y ahora [desde abril] el promedio subió a US$1.500. Los volúmenes claramente aumentaron”, detalla. 

Servicios migratorios con alta demanda

Y así como el dinero se puso en marcha en los últimos días, algunas personas han retomado planes de viaje, incrementando la demanda de pasaportes. La Superintendente Nacional de Migraciones, Roxana Del Águila Tuesta, explicó que antes de la pandemia se entregaban 800 pasaportes por día. Cuando se empezaron a reanudar los viajes, se repartían 300. Actualmente, en cambio, se entregan 2.000 diarios a nivel nacional.

“Dada la inmensa cantidad de solicitudes se han cubierto las citas hasta septiembre. Vamos a trabajar en Breña de lunes a sábado y así vamos a poder entregar 4.000 pasaportes por día a nivel nacional. En Tumbes antes entregábamos 10 pasaportes por día, ahora son 150 por día”, indicó a Sudaca durante la inauguración de una nueva oficina en el Jockey Plaza.

Del Águila se excusó de pronunciarse sobre temas políticos, pero precisó que este incremento de la demanda se registra desde marzo, antes incluso de la primera vuelta, por lo que lo vincula más al aumento de las frecuencias aéreas o a la posibilidad de vacunarse en Estados Unidos. No hay, sin embargo, una medición formal de los motivos detrás del fenómeno de la renovación de pasaportes. 

“El 2020 nadie viajaba y por eso, de pronto, no se dieron cuenta que sus pasaportes vencieron. Podemos apreciar que son grupos familiares. Con esta apertura y estas decisiones esperamos que las citas lleguen solo hasta julio y podamos atender a los que ya sacaron cita”, agregó. Según los vuelos directos que han contabilizado, unos 117,000 peruanos han viajado a Estados Unidos desde febrero hasta los primeros días de junio. Allí muchos buscan una dosis del antídoto contra la Covid-19. 

*Fotoportada: Leyla López

 

Tags:

Ahorros, BBVA, Dólar, Dólares, Elecciones 2021, Migración

Me pasó algo muy curioso el fin de semana. Entre la subida del dólar y, por defecto, del aceite, del pollo, de la papa y del pan, me percaté que mis mascotas, dos perros que en principio pertenecían a mi hermana pero que hace un buen tiempo decidí cuidar, se quedaban sin comida. Hasta aquí nada extraño. Todo en orden. Cada dos meses hago el pedido de su alimento. La última vez fue en marzo. Ya tocaba.

La tienda donde siempre hago esa compra queda muy cerca de mi casa y como allí me conocen y yo al dueño del negocio, paso la tarjeta de débito por el POS sin mirar más detalles, recibo el producto, con él la boleta de venta, y regreso a casa. Ya en casa, dejo las cosas en su lugar y las llaves en la barra de la cocina, recibo una llamada y por alguna razón necesitaba un papel para anotar algo que en estos momentos no recuerdo qué era. Meto las manos en los bolsillos y lo único que encuentro es la boleta que me dieron en la tienda de comida para perros. Escribo lo que tenía que escribir y mientras lo hacía vi la cifra que había pagado hacía unos minutos. Me causa sorpresa. ¿La comida del perro también subió de precio? Termino de hablar por teléfono y de escribir sobre la boleta. Llamo al dueño del negocio y lo primero que le digo es si tal vez se equivocaron al cobrarme no unos soles más sino varios soles más. ¿Quizá el cajero digitó en el POS donde pasé mi tarjeta la cuenta de otro cliente? No hay equivocación, me responde. La comida del perro también subió de precio. Pero estrepitosamente.

El dueño de la tienda me cuenta que hay alimentos importados y otros fabricados en el país pero que hasta esos necesitan insumos del extranjero. Lógicamente la producción se tenía que ver afectada por la subida del dólar. Además, me explica que cada año, por la inflación, las empresas que le proveen a su negocio suelen subir sus precios pero que nunca como ahora. Dice que tiene que ver con la incertidumbre asociada a la coyuntura política y que si Castillo ganara las elecciones los perros también se morirían de hambre.

Sin duda. Los animales también la verían verde o, mejor dicho, no la verían. Quizá Pedro Castillo deba ir pensando, de aquí a una próxima campaña electoral, en unos 20 ó 30 años, en proponer un programa para la pobreza perruna. Esa de “barriga llena, corazón contento” caería bien también para nuestros amiguitos perritos. Claro, si de aquí a 20 ó 30 años Vladimir Cerrón le permite ser el candidato a la presidencia.

1 DE JUNIO DEL 2021 

Tags:

Dólar, Elecciones 2021, Perú

La economía peruana está mucho menos dolarizada que años atrás [bajó del 70% en 2004 al 24% en 2021]. Se podría pensar que entonces los vaivenes del dólar no nos afectan en lo cotidiano. ¿Es cierto o qué mostraría lo contrario?

El pan y el pollo, por ejemplo. El pollo come maíz y el maíz no se hace en el Perú, porque no tenemos un buen clima para producirlo. Nosotros vivimos del pollo, es el alimento del peruano. Cada vez que sube el tipo de cambio, sube el precio del maíz y nosotros pagamos más por el pollo. Igual sucede con el trigo, nosotros no tenemos clima para hacer trigo, lo tiene Argentina, lo tiene Brasil. Cada vez que el tipo de cambio sube, sube el precio del pan, porque sube la importación del trigo. No es tan bueno que suba el precio del pan porque a los ciudadanos nos golpea el bolsillo. Además, con estos mismos dólares, se paga el petróleo, el aceite, la ropa o la soya que también la importan. Entonces, tienes que usar más soles para comprar los mismos dólares. ¿Se genera inflación? Sí. ¿Y eso es malo? Sí. Porque nos cuesta más a todos los ciudadanos de a pie.

La gente, al buscar aferrarse a una moneda más segura y salir a comprar dólares,  genera que haya menos dólares en el mercado también. Entonces, colaboran con el alza del dólar… 

Es un círculo vicioso o virtuoso, pero generas una espiral. Tú compras tus dólares y en la tarde ves a alguien: «Oye, ¿sabes que compre dólares?». «¿Por qué compraste dólares?». «No, mira, por si acaso». Esa persona se queda pensando toda la noche y al día siguiente dice: «¿Sabes qué?, voy a comprar dólares». Se genera esa bola de nieve, en que la gente empieza a pasarse la voz, y a mí me ha pasado los últimos cinco días, ha sido el triple de llamadas de personas que preguntan sobre el tipo de cambio en los dos últimos meses. Además ahora es virtual, tú entras a una página web y cambias al toque. ¿Por qué la gente actúa así? Porque las personas que tienen 50 años a más lo vivieron con Alan García 1. Hay un recuerdo detrás de tu cerebro que te dice «alerta, alerta», que grita «¿te olvidaste?». 

¿Crees que sean conscientes de que sí se genera un alza en productos básicos?

No son conscientes, porque además en este momento tú no estás tomando una decisión 100% racional, estás tomando una decisión un poco emocional. Y en ese punto emocional, eres tú contra el mundo, «yo voy a cambiar mis dólares, pensar en los demás no me importa, yo por lo menos quiero tener dólares». Quizás un poco tomada por la angustia, todos los días sube el cambio: «pucha, debí cambiar ayer que estaba en 3.67, ahora está en 3.68». No es nada la diferencia, pero no importa, tú ya estás [pensando]: «Ha subido, no compré, se me pasó». Te genera esta ansiedad hasta que compras.

Usualmente esto pasa en la bolsa [de valores] también. Yo he comprado, y suele haber una etapa en la cual sube muy rápido, que es lo que pasó la semana pasada. El dólar llegó a 3,85, y ahora ya regresó a 3,79. Creo que hay un poco de esta bola nieve y que el Banco Central [de Reserva] ha contenido muy bien, ha estado vendiendo dólares tres veces más diariamente, que lo que ha vendido en los últimos meses, en enero, febrero por decir. 

¿La experiencia de gobiernos anteriores en personas que están en sus 50 años o 60 qué rol juega en este círculo vicioso?

Juega en la parte más emocional y más temerosa de la experiencia pasada. Es el ´cuco´ que no quieres volver a ver y que te está tocando la puerta. Entonces, esas personas son las que cambiaron dólares en noviembre o en diciembre y que ahora les están diciendo a sus hijos: «Oye, hijito, yo tendría dólares, me acuerdo y te puedo recomendar eso». Entonces, empiezan a generar esa ansiedad. Sin duda, yo creo que esas personas, la mayor parte, no tienen soles hoy día y tampoco han tenido más de la mitad de su plata en soles en los últimos 20 años, porque siempre tuvo ese miedo de que algo malo puede pasar. La confianza se demora en generar. Los más jóvenes nacieron en un entorno en que el dólar no se movía tanto como hace años. Entonces, en su experiencia el sol es una moneda normal y fuerte, donde no hay inflación o hay poca. Te puedo generar angustia contándote historias, pero no las has vivido. 

Hablamos del primer gobierno de Alan García, ¿no?

Con Alan García literalmente ibas a tomar café [por la mañana] y en la tarde te costaba 50% más. Entonces, si tenías dólares, no importaba, tú cambiabas tus dólares y podías comprar dos cafés en la tarde, ya no uno. Porque se generó esta inflación tan grande en precios locales… He trabajado para una compañía de seguros y me contaron que iban con bolsas a Ocoña a cambiar dólares. Ya no contaban los billetes, los pesaban. La historia es que si tienes tus dólares te va a ir bien, no importa lo que pase con el sol.

Imagínate que Castillo o Keiko digan: «Vamos a hacer un gobierno donde vamos a tener cierta línea macro». Todos sabemos que están mal muchas cosas, pero imagínate que le den paz al mercado. El tipo de cambio debería regresar a 3,30, por donde está el precio del cobre. De 3,30 a 3,80, yo creo que es puro nerviosismo, puro miedo, pura angustia, pura sensación de que hacia adelante pueda estar peor de lo que estoy ahora y la economía lo va a reflejar. Entonces, me voy a la moneda fuerte, el dólar se ha denominado como la moneda reserva. Cada 100, 150 años, hay una moneda reserva en el mundo, hoy es el dólar. Probablemente en 50 años sea la moneda china, pero estamos todavía en el periodo del dólar.

¿En qué características del primer gobierno de Alan García encuentras similitud con lo que pudiera pasar con Pedro Castillo?

La primera es que en el primer gobierno de Alan, él tenía como que esta idea regional, que no solo era de él, sino pasaba en toda América Latina, de cerrar la economía, es decir: «Señores no vamos a permitir que se importen productos, los vamos a hacer acá. De esa manera yo voy a generar fábricas, voy a generar empleo». Cerró la economía. Pero hoy día vas a tener un impuesto de entrada de 300%, si tu celular te costaba S/300, mañana te costaba 1000. ¿Pero qué pasaba? En verdad no podías hacer el celular porque no tenías ni las fábricas ni la gente, ni los ingenieros, ni la tecnología.

Dos: el tema de nacionalizar las empresas, que no nos ha funcionado a los países chicos y no muy desarrollados, porque terminas utilizando para la empresa del Estado a todos tus partidarios, así sepan o no sepan manejar la empresa, no importa, los metes ahí. Luego, vendría la reducción de libertades en general también. Alan García trató de estatizar la banca. 

De los resultados de la primera vuelta y las primeras encuestas, ¿qué impactos adviertes en nuestras decisiones económicas?

Tengo el temor ahora mismo de que estas dos semanas han hecho que las personas se asusten. Las personas y las empresas. Han dicho: «Uy, no compro, no invierto. Tenía que hacer esta operación, ¿sabes qué? No, no lo compro». El que quería comprar un terreno para hacer un edificio de viviendas, tampoco lo va a hacer. Se ha parado de golpe la inversión. Como en la pandemia, «nadie sale a la calle», más o menos de golpe. Entonces creo que vamos a sentir el efecto en los siguientes dos meses. Económicamente el país se va a frenar pero rapidísimo. ¿Y qué tiene que hacer el gobierno? Tratar de que las obras sigan avanzando. Carreteras, pistas, lo que sea. Pero el privado se ha asustado, ha dicho: «¿Sabes qué? No sé si invertir mi plata». No se contrata a nadie, no se paga nada, se aguantan a ver qué pasa. Y ese miedo afecta la inversión, afecta el consumo, afecta un montón de cosas. Eso no lo recuperas tan rápido. 

Y conforme se acerque el día de la elección, ¿qué prevés que suceda con el tipo de cambio?

Creo que el dólar no va a seguir subiendo como lo ha estado haciendo porque se van a pegar los dos candidatos. Ninguna elección, creo yo, de dos participantes termina siendo 70-30, 60-40. Si tú ves todas las elecciones en Chile, en Ecuador, en Alemania, siempre terminan siendo medio pegadas, porque se polariza, forman bandos. Entonces yo creo que a medida de que se empiecen a pegar, el tipo de cambio va a empezar a relajarse un poco, a estar menos tenso. Si mantenemos esa diferencia, que creo yo que es muy poco probable, el tipo de cambio va a reflejar eso. 

¿Y ya con el resultado de la segunda vuelta?

En caso que gane Pedro Castillo y si es que no hace una hoja de ruta, el tipo de cambio va a seguir subiendo para el 28 de julio. ¿Por qué hasta el 28 de julio? Porque el 29 él va a empezar a decir y hacer cosas. Pero como tienes tiempo antes de que asuma, tú vas a comprar dólares antes, y ahí el Banco Central va a vender [dólares]. El Banco Central tiene muchas reservas, muchas, muchas, muchas. Puede vender todos los dólares que están en soles en el banco. Pero la idea es que no te quedes sin dólares, porque necesitas esa plata como reserva, para comprar productos, etc. Entonces va a ser una devaluación lenta [del sol], pero se va a dar. Vamos a perder reservas, tenemos una línea de 11 mil millones con el Fondo Monetario [Internacional], y la van a jalar (utilizar). 

¿Habrá un punto de quiebre o momento decisivo?

El día que nombre al Banco Central y al Ministro de Economía será la segunda parte importante. Cuando tengan que cambiar a todos los miembros del Banco Central, ese día va a ser como la fecha clave donde las personas van a decir «ok, tengo miedo» o «ya no tengo tanto miedo como antes». En los casos en que es injustificado, en que [Castillo] nombre un banquero central o un Ministro de economía que la gente diga «mira, a este tipo le gusta la estabilidad más que otra cosa”, entonces el tipo de cambio se va a empezar de nuevo a apreciar. 

Si él no le quita la ansiedad, el 4 está a la vuelta de la esquina. De 3,85 a 4 ya no es tanto. Entonces, sin duda, si [Castillo] no quita esta sensación de angustia, porque dice: «No, yo voy a seguir con mi plan, que es una locura, pero no importa», antes del 28 de julio estamos en 4, te lo firmo sin duda. Y 4,50 a fin de año también, esa es mi percepción. El otro caso es al revés: si hay estabilidad, ya sea porque Keiko nombra gente de confianza, o Castillo nombre gente de confianza; el tipo de cambio se iría a 3,60, 3,50, 3,40, y ahí te conviene tener soles.

«No hay nada más cobarde que un dólar», dice la conocida frase, ¿quiénes son los que reflejan más su ansiedad o miedo?

La persona natural de a pie, la que tiene sus poquitos ahorros y que se muere de miedo de que lo poquito valga menos de aquí hacia adelante. Todas las empresas también y los grandes. Pero yo diría, el que más temor tiene es el que ha ahorrado durante mucho tiempo. S/50,000, por ejemplo, y de repente dice: «Pucha, con esos S/50,000 pude haber comprado 15 mil dólares, y ahora puedo comprar S/12,000, luego S/10,000. Pero el carro que quería sigue costando en dólares, ya no puedo comprar el carro». En ese momento te das cuenta que, efectivamente, tus soles valen menos. Y [sucede que] el carro lo quería comprar para hacer taxi, para utilizarlo como fuente de trabajo. En ese momento, esa persona dice «mejor voy comprando dólares, porque ese taxi va a seguir en dólares». Yo creo que ese es el que sufre más.

Claro, lo sufre, lo pierde.

Y no lo recupera.

¿Pero quienes tienen más poder de mover el tipo de cambio son las empresas grandes? ¿O entre los chiquitos pueden tener igual impacto?

Yo creo que los millones de chiquitos pueden mucho más que las empresas grandes, porque con las empresas grandes, finalmente el Banco Central dice: «¿Cuánto quieres comprar?». «Quiero comprar 200 millones». El Banco Central se lo da. Entonces, cuando viene un millón de chiquitos todos los días, son 200, 200, 300, es mucho más potente. 

Pocos días antes de la primera vuelta fui al Jirón Ocoña y la lectura de los cambistas era que los vaivenes del dólar eran reflejo de las encuestas. “A veces vienen como palomas a comprar, otras a deshacerse de los dólares”, “Mucho psicosocial”, era su lectura final y repetitiva.

Y eso es un negocio bien peruano. Tú vas a Chile, por ejemplo, y hay algunas casas de cambio. Vas a Colombia igual, casi no hay. Porque en esos países no se dolarizó la economía, por decir. Pero es un muy buen negocio ser cambista.

 

Foto de portada: Gestión.

Tags:

Alan García, Dólar, Elecciones 2021, Fuerza Popular, Keiko Fujimori, Pedro Castillo, Perú Libre, Tipo de cambio

Todos los días, de lunes a viernes, Alexandra Ames, David Rivera y Paolo Benza discuten los temas más importantes del día por Debate. En nuestro episodio número 118: El precio del dólar no para de subir, ¿influirá ello en la campaña? Castillo hace agua por escasez de equipo técnico y Keiko no se queda atrás. Y el cese colectivo de Telefónica.

En Soudcloud:

En Spotify:

 

Tags:

Dólar, Keiko Fujimori, Pedro Castillo

“Ya deben haber volado”, le dice un cambista de Jirón Ocoña a otro mientras se ríen. “Nosotros le decimos así. Cuando las personas compran dólares [a un valor] alto, y al día siguiente amanece bajo, ya volaron”, explica uno de ellos. Ocoña es uno de los jirones que desembocan en la Plaza San Martín y también el punto de referencia del dólar paralelo en Lima, aquel que no se transa a través de entidades financieras.

 

Ambos cambistas coinciden en que han sido las encuestas las que han marcado la pauta. Según su lectura, los días en que el dólar trepó hasta casi los S/ 3.80 coincidieron con que Verónika Mendoza disputaba el segundo puesto en las encuestas. Es miércoles 7 de abril y hoy perciben un panorama muy distinto. “Los tres últimos días la gente ha venido como loca a vender [deshacerse] sus dólares. Hay mucho psicosocial”, sostiene el mayor de ambos, que suma 30 años como cambista en Ocoña. Víctor, su colega, cuenta que empezó el mismo oficio a los 16 años y que ya lleva 15 en el tradicional jirón del centro histórico de Lima.

Cambistas
Cambistas y casas de cambios en Jirón Ocoña, 5.30 de la tarde del miércoles 7 de abril. Foto: Luisa García.

«Hoy el dólar está afectado por las elecciones. No importa mucho qué es lo que pase fuera”, sostiene Carlos Rojas, especialista en mercados de capitales y gerente general de la administradora de fondos de inversión Capia SAFI. “En el muy corto plazo lo clave es qué tanto miedo tiene la gente. (…) ¿Miedo a qué? A la incertidumbre. No sé qué va a pasar, entonces me agarro a la moneda fuerte que es el dólar. Si tienes mucho miedo, vas a salir a comprar dólares», afirma en conversación con Sudaca.

«Si es que el lunes sale Pedro Castillo y Verónika Mendoza, el tipo de cambio se va a 3.75, porque [los electores] piensan: un candidato de izquierda le va a hacer daño a la economía, mejor compro mis dólares antes de que esto se vuelva «Venezuela» como dicen, el extremo. Es muy emocional. Y si salen, por ejemplo, Hernando de Soto y George Forsyth, dos candidatos que son de centro derecha, (…) que la gente siente que van a mantener las cosas, el tipo de cambio se va de 3.63 a 3.55. Entonces depende de tu visión», agrega.

El dólar es la variable financiera que más rápido se mueve, afectado por eventos económicos y políticos. Al arranque de 2020 el tipo de cambio interbancario que publica el Banco Central de Reserva estaba en 3.300, sin embargo, aun tomando en cuenta algunos descensos, desde entonces no ha regresado a ese nivel.

Las últimas dos semanas el tipo de cambio subió hasta los 3.77 soles por dólar, pero le siguió una baja que lo hizo llegar hasta los 3.60. Al menos en los últimos 15 años el precio del dólar no había alcanzado un punto más alto que los 3.77 del 30 de marzo, de acuerdo a data del BCR.

Evolución

La semana pasada, en los días de mayor alza del dólar, más compradores aparecieron y por montos relevantes: 30 mil, 40 mil o 50 mil dólares, coinciden tres cambistas de Ocoña. Quizás se trataba de gente que quería tener una inversión o que necesitaba comprar mercancía o insumos en dólares. “¿Qué pensarían? ¿Quizá que luego subiría más?”, se pregunta Víctor, el único cambista que se atreve a brindar su nombre, pues la falta de seguridad (robos e incluso asesinatos años atrás) en esa cuadra los ha hecho ser reservados y desconfiados.

—Ocoña es como el centro de todo el sistema cambiario en Lima. Acá vienen los cambistas de otros distritos a ‘stockearse’. Pero nosotros no sabemos qué puede pasar [con el tipo de cambio] — dice Víctor.

Diferentes actores económicos consultados por Sudaca, hablan de un fenómeno electoral sumado a la crisis económica generada por la pandemia como dos factores determinantes. Los cambistas de Ocoña repiten algo que viven a diario: el precio del dólar se define por la oferta y la demanda. Una regla que vale para el popular jirón como para los mercados de capitales. Mientras menos dólares haya en el mercado, el precio de este se encarece. Siguiendo la lógica de Rojas, sería el efecto del miedo y la elección de comprar, en la que la subjetividad juega un rol evidente.

Entre 2018 y 2019, Isabel Gonzales se endeudó en dólares para poder costear sus estudios de postgrado en el extranjero. Comenzó a pagar de regreso el préstamo en el mes de noviembre previo a la pandemia, con cuotas de entre $1,000 y $2,000 mensuales. Hoy solo le falta amortizar dos cuotas de $1,500, pero siente que la pandemia ha marcado el peor escenario para su deuda y que el vaivén de las últimas semanas solo lo ha empeorado.

Evolución

Con el avance de 2020, encontrar en Santiago de Surco, el distrito en el que vive, una casa de cambio con stock de dólares se fue haciendo cada mes más difícil. Aprendió, entonces, a coordinar con anticipación con un cambista de su zona para no pasar apuros. Gana un sueldo en soles y con ello ha sufrido cada alza del dólar en los últimos meses, así como las crisis políticas locales. Aunque debe cancelar su próxima cuota a fin de mes, ha decidido arriesgarse hoy y comprar los 1.500 dólares antes de que los resultados de las elecciones puedan quizás encarecer su compra.

Como ella, hay otros que sufren los efectos del alza del dólar: los consumidores finales de productos importados. Por ejemplo, si necesitas instalar o reparar el motor de una cochera levadiza, te requerirán el pago en dólares. Un motor de ese tipo llega vía importación de una empresa mayorista. Zengo SAC es una de ellas. Su gerente general Felipe Muñoz explica a Sudaca que su empresa no se ha visto perjudicada por el vaivén del dólar gracias a que los talleres que les compran los motores también les pagan en dólares, y estos a su vez también cobran a los usuarios finales en dólares.

Pero una de sus potenciales clientes, Maritza Martínez, ha decidido esperar a que pase la primera vuelta para ir a comprar los 350 dólares que le piden por el motor y la instalación que necesita para reparar su cochera.

«Si el Perú no hubiera tenido todo este ruido político, el tipo de cambio hoy estaría ahora en 3.30 o 3.20», sostiene Carlos Rojas. Se refiere principalmente al proceso de vacancia de noviembre último. Para el gerente general de Capia SAFI, a diferencia de la vacancia de Pedro Pablo Kuczynski y el cierre del Congreso en 2019, la salida de Martín Vizcarra era algo que se tornaba menos comprensible en un contexto de pandemia ante los ojos de los inversionistas. Fue «catalizador en nuestro cambio de tendencia», sostiene en alusión a un alza del dólar aun más marcada.

Una tendencia que ha tenido a sus principales perjudicados entre aquellos con deudas en dólares y los consumidores finales de productos importados, así como aquellos microempresarios que importan insumos para sus negocios.

Los grandes importadores suelen negociar y fijar el tipo cambiario en los contratos mismos, por lo que estos vaivenes no les perjudicarían sustancialmente al comprar insumos de afuera. Así lo explica Rafael Zanich, gerente de Estudios Económicos de ComexPerú, gremio de importadores, exportadores y empresas vinculadas a la cadena económica del comercio exterior. Sin embargo, el caso de los microempresarios sería diferente.

«Si tienes un pequeño negocio, vendes productos que traes de afuera y los ofreces aquí en soles, sí te vas a ver afectado. Vas a cobrar lo mismo por algo que te costó más caro», expone Zacnich, que a su vez resalta el rol del BCR para suavizar los cambios bruscos en el precio del dólar con medidas estratégicas.

Evolución

Lo cierto es que el dólar paralelo apenas ha revertido un poco su caída de esta semana. «La semana previa a elecciones siempre hay mucho movimiento, el tipo de cambio se eleva por la incertidumbre», apunta el especialista de Comex, quien se enfoca entonces en analizar la bajada.

«Por el efecto externo, el tipo de cambio tendería [ahora] al alza en base a una mayor fortaleza de Estados Unidos que ya se está produciendo, pero no ha sido así», reflexiona Zacnich. «La caída tan marcada que ha sufrido el dólar esta semana está asociada al escenario político», agrega y sostiene que la razón sería el que Verónika Mendoza se haya alejado aparentemente de los primeros lugares.

«Eso es lo bonito y riesgoso de la economía: tomar decisiones sobre algo que aún no ha pasado», concluye. En palabras de Víctor, cambista en Ocoña: “Sea que suba o baje [el precio del dólar], la gente siempre se alborota”.

La fotocomposición y los gráficos de esta nota fueron elaborados por Leyla López.

Tags:

Dólar, Hernando De Soto, Pedro Castillo, Tipo de cambio, Verónika Mendoza
Página 3 de 4 1 2 3 4
x