El último jueves 2 de mayo, sucedió en el congreso algo sorprendente.
A pesar de que ya existían los votos más que suficientes para una nueva aprobación mayoritaria, Segundo Quiroz volvió a detener la tan necesaria ley de masificación del gas.
El lobby del gas apeló a la decisión arbitraria y unilateral del presidente de la Comisión de Energía y Minas para beneficiar a los consumidores más grandes en perjuicio de los más humildes.