En sectores como la logística y minería la transformación digital se ha vuelto indispensable. El uso de tecnología para crear nuevos modelos de negocio, en contexto de covid-19, además, viene modificando la forma en que vivimos, trabajamos y nos relacionamos
La crisis sanitaria obligó a muchas empresas peruanas a digitalizar sus operaciones, llevar sus negocios en línea, incursionar en el comercio electrónico y adaptarse al teletrabajo. En este contexto, según datos de Movistar, las herramientas de teletrabajo multiplicaron su compra por 10 desde que inició la pandemia, el e-commerce o chatbots de atención se volvieron más populares y las ventas por internet se incrementaron en 900%. El objetivo de este proceso -aseguran los expertos consultados- es mejorar la competitividad de los negocios, a través de la innovación.
Entre los sectores que pudieron reaccionar más rápido a la digitalización se encuentran: Telecomunicaciones, banca, retail, así como consumo masivo y servicios; construcción y actividades extractivas.
“La transformación digital se trata de un modelo de adaptación, de cambio o de adecuación hacia la cuarta revolución industrial y que se debe hacer lo antes y más rápido posible, porque las empresas que no lo incorporen estarán en riesgo de desaparecer en el tiempo”, explica Juan Flores, CEO y fundador de Ynnovadores, plataforma de emprendimientos que busca descubrir, difundir y conectar a jóvenes emprendedores con diferentes personas y organizaciones que aporten en su aceleramiento.
Y agrega: “Se trata de un proceso que utiliza la tecnología para crear nuevos modelos de negocio, además de atender la digitalización de los procesos, nuevos procesos que modificarán la forma en que vivimos, trabajamos y nos relacionamos. El concepto es fácil de entender, pero para muchas empresas, sin importar el tamaño, les es difícil llevarlo a cabo”, indica Flores.
Un mini boom
La cuarentena y la pandemia en el Perú aceleraron el proceso de digitalización de las empresas en tres años. Para lograrlo, utilizaron empíricamente sus conocimientos y su experiencia para intentar salir adelante. El desempleo originó un mini-boom del emprendimiento que ha tenido que buscar la digitalización inmediata. “Vender productos en plataformas sociales y canales digitales de delivery ha sido un salvavidas para muchas familias”, explica Flores.
En tanto, para la gran empresa -señala el experto- entiende que dicho proceso de transformación digital debe verse como una oportunidad de aprender y cocrear con startups y emprendimientos de alto impacto, como una de las formas de acelerar este proceso.
“A esto le llamamos innovación abierta. En los últimos meses, tanto en México como en Chile se han abierto convocatorias de grandes transnacionales para desarrollar soluciones a problemas concretos y generando posibilidades de conectar empresas grandes, con medianas, pequeñas y con startups para buscar colaborar y ganar todos juntos”, señala el CEO de Ynnovadores.
Aún nos falta mucho
Un estudio del PAD-Estudio de Dirección, menciona que se le reconoce una altísima importancia (94%) a la Transformación Digital, pero aún hay mucho por trabajar y corregir, sólo 17% de los altos ejecutivos encuestados señala que tiene resultados muy satisfechos con su avance y logros.
“El mundo es digital, debemos adaptar nuestros sectores y proyectarnos a la búsqueda de la generación de data para ofrecer valor. Uno piensa en Amazon, Facebook, Google, Alibaba, Microsoft, Apple como si fuera algo inalcanzable; yo pienso que si seguimos con esa actitud, jamás lograremos nada transcendental. Seguiremos celebrando a las marcas de siempre y los medianos, pequeños y micro empresarios no podrán crecer hacia algo valioso. Es en tiempos de crisis en donde muchos dan saltos cuánticos, ojalá que sea el turno de nuestro país”, sentencia.
Logística digital
Uno de los sectores donde la digitalización viene jugando un rol importante es en el área logística. Le consultamos a Alberto Porras, subgerente de Consultoría de GS1 ¿Cómo se viene desarrollando este proceso en dicho sector?
Para digitalizar- indica- lo primero que se debe realizar es un diagnóstico de la situación actual. “Es prioritario realizar primero una evaluación de los procesos en curso, las tecnologías disponibles y los perfiles de las personas involucradas, investigando qué es lo que se desea mejorar. La transformación tecnológica, por sí sola, no va a efectuar mejoras "por arte de magia"”, señala.
Partiendo de la pregunta ¿Cómo se pueden usar los datos y las capacidades digitales para crear nuevo valor a los clientes?, Porras señala que es importante tener en cuenta qué están haciendo los competidores para tratar de satisfacer a los clientes agregando valor a sus servicios, en este contexto digital.
Por otro lado, señala, debe darse una mirada a las plataformas disponibles (realidad aumentada para el caso de almacenes, sistemas de última milla, RFID para control de activos fijos e inventarios, software WMS que actualmente significan una inversión mucho menor a la tradicional, etc.), tener por objetivo crear soluciones ad-hoc que obliguen a los clientes a "adaptarse".
Teniendo en cuenta que, en el terreno de la transformación digital, la infabilidad no existe. Se debe tomar decisiones, y algunas no serán perfectas, pero los errores deben tomarse como una inversión que permitirá, finalmente, alcanzar los objetivos trazados. Por ello -Afirma el vocero de GS1- la información y la educación ejecutiva es imprescindible para tener actualizadas las competencias personales y apoyar el cambio cultural.
Para Porras, uno de los sectores ‘más beneficiados’ por esta nueva situación ha sido el retail, puesto que muchas personas se han volcado a las compras por internet. “Antes de marzo del 2020, el sector retail había comenzado a realizar incursiones en los canales digitales. Actualmente, es una obligación. Si bien todavía hay personas que prefieren el método tradicional (ir físicamente a las tiendas), es muy probable que, conforme se afine y mejore las ofertas por canales digitales, la brecha existente disminuya. Uno de los ejemplos más claros a nivel mundial, es el crecimiento experimentado por Amazon en estos meses”.
Amazon, el gigante del comercio electrónico, cerró su año fiscal 2020 con unas ganancias netas de 21.331 millones de dólares, casi el doble de los 11.588 millones facturados en 2019, gracias al gran impulso de las compras por internet a consecuencia de la pandemia.
Sin embargo, en nuestro país, una de las desventajas en el proceso de compra por internet es el proceso de entrega. ¿Cómo hacerlo más eficiente? “Sí, de hecho, es una de las principales desventajas, pero está mejorando”, afirma Porras. “Existen ya en Perú (para ciertos artículos y según determinado horario) "entregas para el mismo día"”.
Para lograr mayor eficiencia, asegura, influyen diversas variables, pero una de las más críticas es el tener un adecuado manejo de la data y la calidad de la misma, que permita un flujo más rápido de los pedidos a través de todos los procesos y áreas involucradas.
¿Mina de oro?
Un sector donde la digitalización y las soluciones tecnológicas se han vuelto indispensables, es en las operaciones mineras, que les ha permitido ahorro en el gasto de sus proyectos, con la llegada de la pandemia ¿qué sucedió en el sector?
Según Miguel Cardozo, vicepresidente del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú, el desarrollo tecnológico del sector minero a nivel mundial ha estado liderado por el desarrollo de equipos y procesos para sus operaciones, tanto en el tema de la extracción y transporte de los minerales, como en su procesamiento.
“Gran parte de esto avanzó hacia el desarrollo de maquinarias y equipos autónomos que redujeron los niveles de riesgo operativo y seguridad industrial, pero la necesidad actual está en optimizar el uso de estas ventajas mediante la digitalización, lo cual permitirá a los mineros ser más eficientes y reducir costos mediante la optimización en tiempo real de los procesos y la integración de datos”, señaló Cardozo.
El uso de tecnología de punta que permite mayores volúmenes de producción -asegura- ha sido una enorme ventaja. Australia ya tiene una mina de hierro totalmente autónoma, otros países mineros como Canadá y Chile ya están en camino.
“Y el Perú no podrá quedarse atrás, pero la digitalización dará un salto cualitativo de tal importancia que ha tomado una gran prioridad para las empresas mineras”. La principal dificultad -agrega Miguel Cardozo- es que se debe avanzar muy rápido para poder aprovechar el crecimiento de la demanda de metales conocidos y de nuevos metales requeridos por el violento desarrollo tecnológico del mundo.
Este desarrollo viene acompañado, además, por la necesidad de aportar nuevos avances tecnológicos que permitan enfrentar con mayor solvencia los retos del desarrollo sostenible y la gestión de temas socio-ambientales, climáticos, reducción de emisión de carbono mediante energías limpias, cierre sostenible de minas, entre otras demandas por venir.
“La pandemia forzó el trabajo a distancia y aceleró inversiones adicionales en los procesos de digitalización, pero abrió también las puertas a nuevos conceptos de eficiencia en la organización del trabajo y reforzó la tendencia hacia el uso de procesos autónomos”, sentenció.