Poco a poco diversos sectores se van reactivando, e incluso algunos ya están empezando a ver ciertos niveles de recuperación y crecimiento. Según el Centro de Investigación de Economía y Negocios Globales de la Asociación de Exportadores CIEN-ADEX, el stock laboral creció en 24.1% en 2021 comparado con el mismo periodo anterior.
Uno de los rubros que ayudó a impulsar esto, ubicado en el cuarto puesto, es el de las prendas de vestir con un stock de 259,055 trabajadores y una variación positiva de 58.5%, impulsado por la mayor demanda de mano de obra para confeccionar y exportar productos como t-shirt de algodón, suéteres y chalecos, pijamas, prendas para bebés, vestidos y más.
En ese sentido, Sudaca conversó con Sandra Andrade, jefa de marketing del Centro de Altos Estudios de la Moda (CEAM), para revisar las necesidades de este rubro, e indicó los miles de puestos que el sector requiere. “Recordemos que para elaborar una prenda no solo bastan las telas, tenemos que considerar avíos, es decir cierres, botones, hilos, elásticos, y también talleres especializados ya sea en estampado, sublimado, bordado, y otros acabados. Esta industria mueve miles de puestos de trabajo, no es solo el diseñador”, indicó.
Mercado en constante cambio
La representante de CEAM explica que si bien el mercado ha cambiado en estos años, este no ha dejado de comprar y vender. “Lo que ha hecho es cambiar su forma de hacerlo, ahora es más digital, ya no tiene miedo a comprar por Internet”, menciona.
“También está preocupado por el medioambiente y eso lo vemos reflejado en la cantidad de marcas que promueven la moda sostenible. El consumidor está buscando prendas que duren mucho más tiempo en el clóset, y eso es un reto para el profesional de la moda, porque debe elaborar prendas de alta calidad y que se mantengan vigentes por más tiempo. La época del fast fashion ha acabado y es importante redireccionar el negocio hacia otras alternativas con menor impacto ambiental”, añade Andrade.
La experta señala además que los empresarios de la moda deben de tener claro que es necesario adaptarse constantemente a lo que pide el mercado. “Hoy el mercado está valorando mucho los atributos detrás de una marca, un gran número de consumidores no compra un producto, compra la ideología de la marca”, explica.
Necesidades del rubro textil
Andrade considera que el Perú tiene una gran historia textil que no es aprovechada en toda su capacidad. “El Perú también tiene muy buena mano de obra, los talleres de confección son capaces de realizar acabados A1, tenemos muy buena materia prima, pero por alguna razón se priorizan las importaciones en lugar de promover las fábricas de telas, como habían antes”, advierte.
“Tenemos un reto inmenso, que es crear marcas con valor, pero no lo vamos a poder cumplir si no existen políticas que beneficien a los empresarios de la industria de la moda. No tenemos a nadie que luche por esta industria, que podría ser la que reactive la economía de nuestro país. Tenemos la capacidad de vestir a toda Sudamérica, pero estamos concentrados en vender producto a bajo precio, cuando la salida debería ser revalorar la moda peruana. Competir por precio no es la clave, debemos competir por atributos de marca”, finaliza.
