«El empleo formal está compuesto en 18 mil empresas que dan el 80% de los ingresos como impuestos. Es importantísimo que no se pierdan las empresas formales», señaló Ricardo Márquez, presidente de la SNI.
Un empresario formal tiene más probabilidades de acceder a buenos y grandes clientes, quienes van a solicitar la prestación de un servicio de una empresa constituida y en regla, además de los múltiples beneficios financieros que brinda el estado de formalidad. Por otro lado, ser una empresa informal resulta un contingente, debido a que ante una fiscalización, por ejemplo, de la SUNAFIL o la SUNAT, podrían poner multas.
Un informe de Villa Muzio & Asociados, estudio contable, explica que la formalización de la empresa es un paso muy importante a tomar, pues no sólo asegura la legalidad de esta sino que otorga una serie de beneficios. Algunos de estos son:
Credibilidad: Te permite construir una imagen sólida frente a clientes, proveedores, medios de comunicación y el público en general.
Financiación: Las empresas formales pueden acceder a mejores préstamos y créditos de diferentes instituciones financieras.
Crédito fiscal: Puedes realizar compras con facturas y acceder al crédito fiscal.
Buscar socios comerciales: Ser formal te permitirá asociarte con otras personas y empresas con el fin de mejorar el posicionamiento de tu marca.
Licitaciones: Puedes participar en licitaciones públicas y realizar trabajos para el Estado.
Atraer inversionistas: Tienes más posibilidades de llamar la atención de inversionistas.
Mejor control del negocio: Si llevas adecuadamente tu contabilidad, podrás tener un control acertado sobre los ingresos y egresos de tu negocio. Esto te permitirá implementar las mejoras necesarias y tomar las decisiones correctas.
Evitar sanciones: Si mantienes todos tus documentos en regla y cumples con tus obligaciones, evitarás sufrir multas y otras sanciones, como el embargo de tus bienes o el cierre de tu negocio.
Beneficios: Puedes acceder a programas del Estado o de instituciones privadas que buscan beneficiar a las micro, pequeñas y medianas empresas.
Responsabilidad social: Si pagas los impuestos que te corresponden, estarás contribuyendo significativamente al crecimiento de tu país.