Dina Boluarte en su laberinto

UNO

La izquierda ha perdido una oportunidad histórica. Pedro Castillo cometió un suicidio político por inepto y cojudo. Dina está en el mismo camino. No tiene partido político. Su frágil presidencia esta sostenida por la Derecha, los Militares y ciertos medios de comunicación. Nadie más.

Para muestra un botón.

En su programa, Mario Ghibellini entrevistó al ex alcalde de Lima.

¿A alguien le puede importar la opinión de un cadáver político como Jorge del Castillo – con respecto a los últimos sucesos- o solo a Ghibellini, porque responde a los intereses de la Derecha recalcitrante?

Incluso el Diario el Comercio en su editorial – hace unos días- indicó que no es conveniente la renuncia de Boluarte.

En las antípodas, se encuentran los corresponsales extranjeros y los medios a los cuales pertenecen. A quienes, posiblemente, el seudo intelectual y arrogante de Aldo Mariátegui los llamaría.

Caviares.
¿No es así?

Otros Medios nacionales, incluidos politólogos prestigiosos como Gonzalo Banda y Eduardo Dargent, coinciden en el cisma político, y sus posibles soluciones. Las cuales está en manos de nuestros congresistas. Sin embargo, personajes, como Montoya, inciden en una latente mediocridad y orfandad de ideas. El personaje de marras presentó un proyecto de ley.

Para que la policía pueda disparar, si manifestantes los superan en número.

Me parece que no hace falta agregar nada más.

DOS

El humorismo político es una manifestación de inconformidad, de búsqueda de cambio y transformación del orden imperante, una expresión del descontento social y, en tal sentido, subvierte el orden político.

Carlos Álvarez fue uno de los primeros humoristas políticos. Somos coetáneos. Conozco gran parte de su carrera. Incluido su servilismo –por intereses personales- a Fujimori. Después de su periodo nefasto con el poder, volvió a brillar en compañía de Jorge Benavides. Llegaron a tener el programa número 1.

El Especial del humor

Luego se separaron. Cada uno trato de destacarse, con suerte desigual. Eso sí, nunca obtuvieron el éxito de antaño. Derivaron en un humor chabacano y sexista – ¿o siempre lo fue? – Eso sí, JB nunca se destacó por libretos ingeniosos, su antiguo socio sí.

En los últimos tiempos, Álvarez parodió a Pedro Castillo, su esposa y demás miembros del gobierno. Incluido, el expresidente boliviano Evo Morales. A eso deben atenerse las figuras políticas. Lo insólito de todo esto, es que, en la coyuntura actual, un pétreo silencio lo invade.

Ah perdón, si hizo un pedido por la paz, junto con otros comediantes en su programa. Perfecto, pero uno de ellos insultó a los que protestan. Tampoco Carlos Álvarez hizo referencia al nefasto accionar del Gobierno. Para más inri, indicó que las muertes de los manifestantes eran por culpa de ellos.

¿O es que está alineado al poder, nuevamente?
Claro, pertenece a Willax. Creo que está todo dicho, ¿no?

TRES

He podido recibir que, en estas comunidades andinas, las hermanas y hermanos que saltan a las protestas están siendo chantajeadas, están siendo coaccionadas. Porque les dicen sino vas a marchar te vamos a pedir una cuota de 100 soles. Si no vas a marchar te vamos a cortar el suministro de agua y si no vas a marchar te vamos a incendiar tu casa. Yo creo que eso, ya no es una protesta sana, eso no es una protesta pacífica.

Presidenta Dina Boluarte

Uno de los principales problemas de los medios de comunicación, es que las redes sociales han subvertido todo. Los adolescentes, hoy en día, no ven televisión y menos noticieros. Todo se enteran a través de las redes sociales. Menos escuchan radio, para eso tienen Spotify. La globalización hace que la gente se entere de todo, en una fracción de tiempo.

De ahí que muchísimos jóvenes han visto a través de videos como la gente desde provincias despiden a los manifestantes, con algarabía e incluso dándoles víveres. En ningún momento, se percibe lo que manifiesta la Presidenta, todo lo contrario. Son distintos los videos que se han hecho virales en las redes con idénticas escenas.