Fiorella Danjoy

Ser gentil, ¿no cuesta?

"Ser amable cuesta poco y vale mucho."

[TIEMPO DE MILLENIALS] Hace un par de semanas hice un viaje nacional que fue “eventful” por decir lo menos. Los empujones que recibí en la puerta de entrada al aeropuerto me advirtieron que estaba caminando lento así que aceleré el paso y noté que empecé a caminar defensivamente hacia mi siguiente destino, un restaurante para almorzar. En este ocupado lugar había una cola larga conformada en su mayoría por turistas que esperaban pacientemente mientras una pareja de peruanos reclamaba de forma agresiva.

Cuando llegué a mi destino, subí al taxi que me esperaba. El conductor manejaba a mil por hora así que le pedí que baje la velocidad, luego de idas y vueltas de no aceptar de malas formas, llegamos a un consenso y bajó la velocidad. Entendí que el señor obtenía mayores ganancias con la mayor cantidad de carreras ida y vuelta al aeropuerto, así sea arriesgando su vida, y que quizá tenía a alguien enfermo en casa o mucha necesidad. Sea como fuera, el señor había aprendido a vivir a la defensiva.

Lo curioso de este viaje es que no pude volver en la fecha programada por mal tiempo y debí viajar a otra ciudad para partir desde ahí a Lima. En las 4 horas que estuve en ruta pensé en muchos ejemplos de mi entorno cercano, las noticias, reporteros, el congreso y yo misma y llegué a la conclusión de que en los últimos tiempos nuestra sociedad peruana está a la defensiva, en pie de guerra. Me hizo pensar en esos videos de TikTok que presentan diferentes situaciones para terminar expresando “amanecí y escogí la violencia”. 

De acuerdo con la Real Academia Española, la gentileza se define como “gallardía, garbo y bizarría” así como “urbanidad, cortesía” y “obsequio o patrocinio económico”. De todas las definiciones, me gustaron “cortesía” que significa demostración o acto con que se manifiesta la atención, respeto o afecto que tiene alguien a otra persona y “obsequio” que es un regalo. Así, podría concluir que la gentileza es un regalo de respeto.

La pregunta es si la gentileza debería ser un regalo o parte de nuestra identidad. La amabilidad es una cualidad que valoramos y apreciamos. Nos encanta relacionarnos con personas positivas, comprensivas y educadas, que nos tratan con respeto y consideración.  Sin embargo, es también una característica escasa y difícil de encontrar y que nosotros mismos no honramos.

¿Por qué cuesta tanto ser amable? Tal vez, por miedo. Para muchos grupos de nuestra sociedad ser amable es equivalente a ser débil, a que te tomen por tonto y se aprovechen de ti. Caso contrario,  ser indiferente u hostil da una sensación de poder y fortaleza que de alguna manera te pone “en ventaja” frente a los demás así que la mayoría escoge este camino, es más fácil. El problema son las consecuencias de una sociedad endurecida y a la defensiva.

Lo interesante es que todas las personas empezamos siendo amables desde niños y es nuestro entorno el que nos endurece a través de vivencias y aprendizajes. Sin embargo, no podemos perder de vista que somos los adultos los que modelamos la amabilidad u hostilidad en los niños y que esta una responsabilidad que no podemos tomar a la ligera.

Así, “si tienes la opción de tener la razón o ser gentil, elige la gentileza”. Wonder, (2017)

Tags:

Amabilidad, Gentileza, Sostenibilidad

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