“Yo respeto y las quiero a todas las mujeres, entre ellas a mi madre, esposa y mis hijas”, escribió Héctor Valer cuando fue acusado por la congresista de Fuerza Popular, Vivian Olivos, de maltratarla verbalmente en septiembre pasado. El primer ministro no pensó lo mismo cinco años atrás, en octubre del 2016, cuando “le propinó un puñete en el rostro” a su esposa y le dio “bofetadas, puñetes y patadas” a su hija, de acuerdo a dos partes policiales.
Ante el escándalo, que la prensa advirtió hace menos de 24 horas, el llamado “Gabinete en la sombra” del Despacho Presidencial ya baraja opciones para reemplazarlo lo más pronto posible. Consideran que su situación es insostenible, según una fuente palaciega que conoce la interna. Bancadas como Avanza País, Alianza para el Progreso, Fuerza Popular y Renovación Popular han anunciado que no le darán el voto de confianza. La ausencia de Valer en la conferencia de prensa de ayer es un reflejo de la situación.
El “Gabinete en la sombra” está integrado por Biberto Castillo, despedido asesor presidencial; Beder Camacho, nombrado secretario general interino; José Fernández La Torre, el jefe de la Dirección Nacional de Inteligencia; y Wilson Pretel, jefe del gabinete técnico de asesores. Llama la atención que Biberto Castillo siga operando a pesar de haber sido despedido por Carlos Jaico, en su última acción como secretario general. Fueron Castillo y Camacho, que ha sido nombrado secretario general interino, quienes ayer convocaron a un diálogo a Hernando de Soto, excandidato presidencial de Avanza País.
Héctor Valer llegó al premierato por recomendación del congresista Guillermo Bermejo. En el Congreso, Bermejo y Valer integran la bancada de disidentes Perú Democrático. El “Gabinete en la sombra” apostaba sus fichas por Roberto Sánchez, el ministro de Comercio Exterior y Turismo.
En caso Valer sea finalmente expectorado del cargo, Sánchez tendría la primera opción. Esto porque el ministro de Salud, Hernando Cevallos, ya dijo que no asumirá la PCM. Sánchez se ha convertido en un incondicional del presidente Castillo y, según una fuente de Palacio, ha pasado también al grupo de asesores en la sombra.
El también congresista por la bancada de Juntos Por el Perú (JPP) despacha seguido con Beder Camacho y el jefe de la DINI, José Fernández La Torre. JPP llegó al Congreso de la mano del Nuevo Perú, de Verónika Mendoza, pero Sánchez ha marcado distancias con ella. No condenó, por ejemplo, la salida de Avelino Guillén del Ministerio del Interior, como sí lo hizo la excandidata presidencial. “Más allá de los nombres o desencuentros, la prioridad es la seguridad ciudadana”, dijo Sánchez a la prensa.
El titular del Mincetur ha salido en defensa de Pedro Castillo cuando ha podido y ha ejercido hasta el rol de traductor. “En ningún momento el presidente ha dicho que va a poner a referéndum la soberanía y entrega del mar a nuestro hermano país de Bolivia. Eso es falso”, dijo, por ejemplo, sobre la reciente declaración del presidente a CNN. Castillo había asegurado que consultaría a los ciudadanos para decidir si Perú le da una salida al mar a esa nación.
La lealtad de Sánchez ha sido recompensada. Permanece al frente de su cartera, mientras sus aliados del Nuevo Perú -Pedro Francke y Anahí Durand- salieron del Gabinete. Verónika Mendoza, incluso, anunció la ruptura con el gobierno en redes sociales.
Al otro lado, en Perú Libre, también están con la sangre en el ojo porque no los tomaron en cuenta en el nuevo Consejo de Ministros. Vladimir Cerrón esperaba tener protagonismo en el Gabinete, pero el presidente le dio prioridad a Bermejo. En venganza, una fuente cercana a Cerrón anticipa que sus más fieles militantes no le darán la confianza al Gabinete Valer.
AMETRALLADORA
El perfil violento del nuevo premier es corroborado por excompañeros de cuando militaba en el APRA. Uno de ellos, un aprista con el que compartió aquella época, lo recuerda por llevar una ametralladora en su paso por la universidad, a inicios de los ochenta. “Se atrevió a llevar una ametralladora para asustar a los estudiantes comunistas que buscaban recuperar su hegemonía en la Garcilaso”, dice. Lo conocían como el “Loco Valer”.
“Es una persona inestable. Tiende al disparate, al improntus. Por eso es que cambia de camiseta todos los días. Castillo se ha disparado a los pies al nombrar a este personaje porque no le van a dar el voto de confianza”, dice a Sudaca Jesús Guzmán Gallardo, veterano dirigente de la estrella, quien también conoció al actual premier.
Lo cierto es que el presidente Castillo ha elegido como cabeza de su Consejo de Ministros a un hombre que le siguió los pasos a Alan García. En febrero de 1993, Valer “abandonó clandestinamente” el Perú y viajó a Colombia para pedir asilo político, de acuerdo a una nota del diario colombiano “El Tiempo”. García había pedido asilo a dicho país tras el autogolpe de Alberto Fujimori, en 1992.
Tres años después, en 1995, García solicitó asilo en Francia. En 1996 Valer hizo lo mismo. “En el año 1996, tras el proceso de traslado de su refugio político a Francia, estudió un Diplomado de Estudios de América Latina en la Universidad Sorbonne IV, de París”, dice la biografía de Valer colgada en el portal del Parlamento.
En el 2000, Valer volvió al Perú con el retorno de la democracia. Los “compañeros” le consiguieron trabajo como profesor en la Garcilaso. En ell 2008, el APRA lo colocó como gerente del Instituto de Desarrollo de Pueblos Andinos y Amazónicos (Indepa), un organismo del Estado que hoy ya no existe. El 2009, Valer promovió una condecoración a Mauricio Mulder, incondicional de García, por su supuesto compromiso con el agro. También apoyó la candidatura de Mulder a la secretaría general del Apra por “su estrecha vinculación con los intereses del pueblo y sus organizaciones”, según el portal “Vanguardia Aprista”.
Varios testimonios también indican que Valer fue cercano a Luis Nava, el secretario personal de García que confesó a las autoridades que Jorge Barata le entregó al expresidente 1 millón 328 mil dólares en loncheras y maletines a nombre de Odebrecht. De hecho, Nava lo jaló como asesor cuando fue nombrado ministro de la Producción. En el 2011, Valer apoyó la campaña de Nava al Parlamento Andino con un pequeño monto -S/750-, según reportes de la ONPE.
El presidente Pedro Castillo ha viajado a Brasil en plena crisis política. Retornará el sábado. Todo apunta a que su flamante primer ministro tiene las horas contadas. Valer, en una entrevista con Rosa María Palacios, dijo que no renunciará. Aseguró que no agredió a sus familiares. Ha decidido atrincherarse en el cargo. El “Loco Valer” está desatado.