La derecha tiene que cambiar de narrativa. La tesis del comunismo gobernando el Perú, el golpismo agazapado, la obsesión con la vacancia exprés, no generan adhesión ciudadana sino todo lo contrario, como se ve en las encuestas, que muestran claramente que la desaprobación del Congreso opositor es mayor que la del gobierno.
De lo mismo que adoleció la campaña de Keiko Fujimori -de un discurso de cambio- adolece la estrategia de la oposición derechista en el país. Si tercamente insiste en no percatarse de ello, se va a pegar un contrasuelazo en la próxima justa electoral.