¿ME AYUDAS A APROBAR LA COLABORACIÓN EFICAZ DE WALTER RÍOS Y A CAMBIO TE AYUDO EN EL NOMBRAMIENTO COMO FISCAL?
Uno de los principales trabajos que se le habría encomendado a Castillo Nieto es que hiciera lo posible por aprobar el acuerdo de colaboración eficaz del expresidente de la Corte del Callao, Walter Ríos Montalvo, cosa que hizo en tiempo récord y mostrando su plena eficiencia.
Como es de conocimiento público, el domingo 13 de diciembre del 2021 el programa de Claudia Toro en PBO RADIO emitió una primicia al publicar el audio del Juez Supremo Núñez Julca que sostiene con un oficial de la Diviac Jorge Rodríguez en donde trata a los investigados del caso Cuellos Blancos como delincuentes y corruptos, adelantando opinión sobre la responsabilidad penal de personas que estaban siendo investigadas violando el principio de presunción de inocencia y el deber de imparcialidad. Frente a la gravedad de los hechos y a la situación insostenible de Núñez Julca en el Juzgado Supremo de Investigación preparatoria la Fiscalía Suprema de Eliseo Fernández Alarcón aceleró el paso y en tiempo récord logró presentar para su aprobación el acuerdo de colaboración eficaz que había firmado con Walter Ríos Montalvo.
Pese a que el Juzgado Supremo de Investigación Preparatoria de Núñez Julca y Castillo Nieto tenía atrasado el despacho y estaban pendientes de resolver pedidos desde el mes de agosto del 2021, entre gallos y media noche, fijan fecha de la audiencia para la aprobación de la colaboración eficaz el día 22 de diciembre del 2021. En dicha audiencia, en la que intervino la Fiscal Fanny Quispe Farfán y el Procurador Público Javier Pacheco, se debía verificar cada uno de los 44 hechos que Walter Ríos Montalvo había delatado a fin de determinar si se había cumplido con corroborar y se habían respetado los demás requisitos fijados en la ley.
Pese a que la Procuraduría Pública de Corrupción de funcionarios había proyectado la realización de varias audiencias en el lapso de uno o dos meses para discutir cada uno de los puntos de la delación de Walter Ríos, sorprendentemente el Juzgado Supremo de Núñez Julca y Castillo Nieto resolvieron que un caso tan complejo se viera de manera fulminante en tres horas y el caso se dejó para resolver. Mientras el caso de la colaboración eficaz de Odebrecht duró más de 15 sesiones y tenía menos hechos delatados que la delación de Walter Ríos, el acuerdo de colaboración del expresidente de la Corte del Callao se vio de manera express como si se tratara de un servicio a la carta. Podemos preguntarnos si se buscaba acelerar los tiempos e impedir que si Núñez Julca era cambiado, otro juez conociera el caso, ya que si advertía los errores que contenía el acuerdo podía desaprobarlo.
El papel de Castillo Nieto aquí era determinante; si él demoraba la redacción de la sentencia de colaboración eficaz de Walter Ríos después de la apertura del año judicial del 2022 se corría el riesgo de que con el ingreso de otro juez supremo al juzgado de investigación preparatoria el acuerdo de Walter Ríos no sea aprobado; de tal modo se aceleró el plazo a como diera lugar a fin de que la sentencia pueda estar lista antes de fin de año. Según fuentes judiciales, una Fiscal Suprema le habría ofrecido interceder con la Fiscal de la Nación Zoraida Ávalos para que sea nombrado como fiscal en el Ministerio Público y así no pueda quedar en el aire y sin trabajo frente a la inminente salida de Núñez Julca como juez encargado del Juzgado de Investigación Preparatoria.
Se coordinaron perfectamente los tiempos y el mismo día que Castillo Nieto entregaba el proyecto de sentencia de colaboración eficaz para la firma de Núñez Julca, el 31 de diciembre del 2021. Ese mismo día salió publicada en el diario El Peruano su designación como Fiscal adjunto provincial provisional. Se trataba de un evidente intercambio de favores al estilo Cuellos Blancos: la fiscalía recibía la aprobación de la colaboración eficaz y Castillo Nieto lograba un nombramiento delivery por los servicios prestados.
Se ha podido averiguar que la conducta de Castillo Nieto con la Fiscalía, en especial, con la Fiscal Fanny Quispe, no era aislada ni solitaria. Según las fuentes consultadas, Castillo Nieto tiene llamadas y comunicaciones constantes con la Fiscal Fany Quispe en la que coordinaban el resultado y el sentido de las resoluciones judiciales que le interesan a la Fiscalía como el levantamiento del secreto de las comunicaciones, las tutelas de derechos, reexamen y algunas acciones semejantes. Dichas fuentes resaltan que Castillo Nieto pedía a la Fiscal Fanny Quispe el envío de resúmenes y de los argumentos en Word que querían que se ingresara en las resoluciones.
La propia Fanny Quispe habría coordinado con los funcionarios de la Oficina de Registros y evaluación de fiscales a fin de cerrar la designación de Castillo Nieto en el tiempo más breve posible y habría convencido a la Fiscal de la Nación para que apurara su nombramiento. Las grabaciones de las imágenes de los pasadizos del Ministerio Público, luego de la segunda quincena del 22 de diciembre, despiertan suspicacias en ese sentido. Incluso, se ha tenido acceso a un audio en donde Fanny Quispe en una reunión admite conocer y tener amistad con Castillo Nieto.
La Fiscal Fanny Quispe y Castillo Nieto, de comprobarse todo lo expuesto, incurrirían en prácticas en las que estaban incursos algunos empresarios y abogados involucrados en el caso Cuellos Blancos, pero esta vez la relación extraprocesal provendría de los propios miembros del Ministerio Público con las autoridades jurisdiccionales. ¿Alguien investiga estos graves hechos?
COHECHO Y ANTECEDENTES FISCALES
Se ha consultado a algunos fiscales y a abogados penalistas y nos señalan que la conducta de ofrecer o pagar por un determinado resultado judicial, antes o después, supone que se ha cometido el delito de cohecho activo. En ese delito debería investigarse si incurrieron Zoraida Ávalos y Fanny Quispe debido a que a cambio de obtener favores judiciales se lograría un nombramiento de Fiscal. Dicho hecho se vio consumado con la Resolución de la Fiscalía de la Nación Nº 1888-2021-MP-FN del 31 de diciembre del 2021 que fue suscrita por la misma Zoraida Ávalos.
Cuando se preguntó acerca de si había antecedentes parecidos los fiscales consultados nos remitieron algunas decisiones del propio Ministerio Público en las que se reflejaba el tratamiento como delito de cohecho del hecho de recibir designaciones o nombramientos como pago por obtener determinadas decisiones judiciales o fiscales.
El caso se remonta a mayo del 2017 en el que el Fiscal de la Nación Pablo Sánchez Velarde autorizó a que se denuncie por cohecho al juez Edwin Elmer Yalico Contreras, debido a que el 2008 declaró fundada una demanda de hábeas corpus a favor de ex Presidente Ollanta Humala Tasso por el caso del Andahuaylazo y el año 2013 fue contratado como asesor principal del Congresista José Antonio Urquizo Maggia, miembro de la bancada nacionalista. Se consideró que el nombramiento como asesor en el cargo de Profesional nivel SP-9 de Yalico fue un delito de corrupción, pese a que se produjo casi cinco años después de haber fallado en beneficio de Ollanta Humala. El caso de la designación de Castillo Nieto como fiscal adjunto provincial provisional por Zoraida Ávalos es mucho más grave porque se produce el mismo día que se dicta la sentencia de colaboración eficaz de Walter Ríos, el 31 de diciembre del 2021, y meses después que se condenara por encubrimiento a Pedro Chavarry y se fallara de manera favorable a Zoraida Ávalos en casos relacionados con Fiscales Supremos que no eran de su grupo de poder: Tomás Gálvez y Carlos Arce.
Las irregularidades en el nombramiento del secretario de confianza Juan José Castillo Nieto como fiscal del Ministerio Público no terminan allí. Por ejemplo, su designación se produce antes que haya renunciado y su renuncia haya sido aceptada por el Poder Judicial; mejor dicho, cuando fue nombrado como Fiscal adjunto provincial provisional por Zoraida Ávalos seguía teniendo relación laboral con el Poder Judicial, tanto es así que el 31 de diciembre del 2021 termina suscribiendo la sentencia de colaboración eficaz de Walter Ríos. Además, Castillo Nieto nunca ha trabajado en el Ministerio Público, ni como asistente fiscal, ni en un cargo administrativo en la Fiscalía; tenía cero experiencia; solo la suerte de una persona bendecida por los astros y el poder absoluto de Zoraida Ávalos explica su designación, rápida y fulgurante. Tanta suerte tiene Castillo Nieto que luego de su nombramiento como Fiscal Adjunto, producido en tiempo récord, no se le envía a trabajar en el pool de fiscales o en una Fiscalía provincial, de Lima o de provincia, sino que se le envía a laborar en la más alta esfera del Ministerio Público, en una Fiscalía Suprema Transitoria que depende de manera directa de Zoraida Ávalos.
El día de su investidura como Fiscal de la Nación Patricia Benavides dijo: “las leyes nos hacen iguales y nadie puede estar por encima de ellas, por ello iremos tras la investigación de cualquier acto delictivo, ya sea del más poderoso o cualquier ciudadano común. Todos aquellos actos que caigan bajo sospecha tienen el deber de comparecer ante la justicia y rendir cuenta por sus actos».
Si el discurso de la flamante Fiscal de la Nación es sincero y honesto debería ser consecuente y, sin pensarlo dos veces, debe abrir investigación a Zoraida Ávalos, su votante en la Junta de Fiscales Supremos como Fiscal de la Nación y que le tomó juramentó en el cargo, y debe comprender en ella a la Fiscal Fanny Quispe y al Fiscal Juan José Castillo Nieto.
No basta hablar; es necesario predicar con el ejemplo. Solo así, como reconoció la Fiscal de la Nación, el Ministerio Público saldrá de su peor crisis.