Una represión ajustada al Estado de Derecho, y una incansable voluntad de diálogo (que en algún momento deberá producirse), deben activarse a la par de la resistencia política a la presión violentista de grupos minoritarios que malcreen que a punta de bloqueos, incendios y agresiones a las fuerzas del orden, pueden imponerle al país un modelo político que las mayorías ni avalan ni avalarán.

Dina Boluarte no debe renunciar
Por:
Juan Carlos Tafur
26.01.2023