El primer mandatario, por supuesto, se ganará varios años de cárcel en el futuro inmediato, cuando deje el poder, si perpetra semejante legicidio, que se sumará a las penas por la larga lista de delitos por los que será procesado y seguramente detenido al día siguiente que deje de ser presidente de la República, pero la desesperación y el pánico en el que se encuentran él y sus allegados en Palacio es de tal magnitud que es perfectamente capaz de huir hacia adelante y llevarse de encuentro todo el andamiaje constitucional con el afán de librarse de la prisión que le aguarda por los actos de corrupción que se le imputan.

¿Castillo prepara un autogolpe?
Por:
Juan Carlos Tafur
17.10.2022