Hay tres hechos que podrían tumbarse al gobierno de Dina Boluarte: 1.- que la protesta social recrudezca y la respuesta represiva sea torpe y desmedida como sucedió entre diciembre y enero; 2.- que cometa un error político mayúsculo que la lleve a enemistarse con sus bases de apoyo congresales en el centro y la derecha parlamentarias; 3.- que aparezca alguna denuncia de corrupción que roce siquiera a la figura presidencial y ello lleve a un mayor desplome de su ya débil apoyo ciudadano y que, por ende, su respaldo congresal se pierda y se produzca una nueva vacancia en la política nacional.
La prensa debe estar atenta a cualquier estropicio corrupto que se pueda cometer. Si la consecuencia de una denuncia es la caída de Boluarte, pues bien merecido será. Ya no podemos repetir el error de tener consideraciones políticas por encima de atingencias morales respecto de una gestión gubernativa.
–La del estribo: más vale tarde que nunca. Imperdible la obra teatral Juzgado de Familia Nro. 6. Magistralmente interpretada por Nani Pease, bajo la dirección de Tirso Causillas, es de lo mejor que se ha visto en los últimos tiempos teatrales peruanos. Lamentablemente, solo va hasta hoy, en el Centro Cultural de la PUCP. Entradas en joinnus.