-Potenciar las reformas de segunda generación, fortaleciendo instituciones de mercado como Indecopi, reguladores, Promperú, Proinversión, etc.
-Seguir desplegando una política comercial libre con todo el planeta.
-Disponer un efectivo papel de control del mercado salvaje al que muchos oligopolios conducen por sus malas prácticas.
-Privatizar Petroperú, Sedapal y las empresas de saneamiento municipales.
-Reformar el sistema de pensiones y tornarlo voluntario. Eliminar la ONP.
-Reformar la fallida descentralización, para evitar que el despilfarro y corrupción hagan que la población no sienta los beneficios de las grandes inversiones mineras.
-Emprender reformas políticas y electorales, pero sin prisa y generando amplios consensos. Demasiado iluminado e improvisado, o interesado, mete mano en este tema.
-Anticipando algunos aspectos, sin embargo, parece menester instaurar una reforma constitucional para volver a permitir la reelección y la bicameralidad.
-Emprender una intensiva campaña de mejoramiento de la educación y salud pública. Ya no es posible desandar la descentralización vigente, pero se puede establecer manejos tecnocráticos profesionales y autónomos de los apetitos políticos de las autoridades locales.
-Arremeter como principal prioridad contra la inseguridad ciudadana y las mafias ilegales que dominan gran parte de los circuitos económicos nacionales (narcotráfico, minería ilegal, contrabando, trata de personas, madereros ilegales, etc.).
-Construir una Amazonía productiva, que haga convivir la inversión privada con las precauciones ambientales. Es perfectamente posible, y hay necesidad de romper con el ecologismo ideologizado de ONGs internacionales que nos quieren llevar de las narices en el tema.
-Potenciar las alianzas público-privadas para generar una inversión multimillonaria en infraestructura de todo tipo, de la que el país carece y sin la cual es insostenible el desarrollo productivo del país.
-Abrir todos los mercados cerrados o parcialmente cerrados, a la libre competencia nacional e internacional.
-Flexibilizar las torpes normas laborales, que, por rígidas, solo contribuyen al empleo informal y a la falta de resguardos mínimos que todo trabajador debería tener (seguro de desempleo, cobertura de salud, garantías laborales, etc.).
-Profesionalizar la administración pública. Extender los alcances de Servir a cuanta entidad estatal se pueda y lograr así un manejo relativamente eficaz de las políticas públicas. ¡Adiós primos, sobrinos, amigos, partidarios!
-Finalmente, establecer, entre los firmantes del pacto, mecanismos internos de rotación de poderes y de resolución de conflictos. Si no, por más acuerdo programático que haya, a la primera crisis estalla la alianza centroderechista que se propone.