Juan Carlos Tafur -Columna

Se necesita un Congreso recio

“Si no hubiese sido por la actitud beligerante y recia de buena parte del Legislativo, probablemente hoy todavía tendríamos sentado a Bellido en el Premierato y a Iber Maravi en el ministerio de Trabajo”

Es justo ponderar el correcto ejercicio político del Congreso de la República para propiciar el golpe de timón que el presidente Castillo le ha dado a su gobierno. Si no hubiese sido por la actitud beligerante y recia de buena parte del Legislativo, probablemente hoy todavía tendríamos sentado a Bellido en el Premierato, a Iber Maravi en el ministerio de Trabajo y a Vladimir Cerrón insuflando radicalismo en la periferia del régimen.

La derecha (Fuerza Popular, Renovación Popular, y Avanza País) lideró la resistencia frente a los despropósitos del gobierno y esta vez fue acompañada por las bancadas de Alianza para el Progreso, Somos Perú, Podemos y los morados, dispuestos a censurar a Maravi, aun cuando pesase la amenaza del expremier Bellido de hacer cuestión de confianza sobre esa eventual censura. Con ello tenían los 66 votos suficientes para bajarse a un sospechoso de filosenderismo, que no era admisible que hubiese pisado siquiera una oficina pública.

Lo que, dicho sea de paso, no deja de llamar la atención es la timorata y diletante actuación política de Acción Popular, partido que claudicó en la primera gran prueba política del Congreso (cuando se vio la confianza al gabinete Bellido: si, como correspondía no se le hubiese dado, nos hubiésemos ahorrado estos dos meses de caos político) y en esta segunda ocasión, guiado al parecer por el izquierdismo latente de Yonhy Lescano, estaba dispuesto a perdonarle la vida a Maravi.

Por supuesto, no hay que confiar ciegamente en la aparente moderación de Castillo. Apenas constituya su propio partido magisterial y pueda participar en elecciones, probablemente esperará a ver los resultados de su flamante agrupación en los comicios regionales y ediles del próximo año, y de acuerdo a ello evaluará nuevamente si conviene pechar al Congreso para buscar su disolución y ya poder participar directamente en las nuevas elecciones congresales, sin el corsé de Perú Libre y el cerronismo, y con la posibilidad reabierta de recorrer el camino de una Asamblea Constituyente.

Por ello es que a pesar del cambio cualitativo positivo que supone la presencia de Mirtha Vásquez en el Premierato -a pesar de los dos o tres impresentables, que parece ser la cuota personal de estulticia del Primer Mandatario-, es menester que el Congreso no baje la guardia y mantenga en ristre el arma de la vacancia si Castillo resucita el afán de disolver el Congreso, y que además no deje de tener ojo vigilante y crítico de los ministros que merezcan interpelación y censura.

Tags:

Cerronismo, Congreso de la República, expremier Bellido, Iber Maraví, Mirtha Vasquez

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