el espejo de la clase política

Toledo: El espejo de la clase política

"Ya no sorprende -a nadie- el arresto de Toledo. Al contrario. Es la secuela lógica, de la descomposición de la política peruana. Desde 1990 hasta la fecha, todos los gobernantes han sido acusados de corrupción."

[PAPELES VIRTUALES]

UNO

Ya no sorprende –a nadie– el arresto de Toledo. Al contrario. Es la secuela lógica, de la descomposición de la política peruana. Desde 1990 hasta la fecha, todos los gobernantes han sido acusados de corrupción. Uno de ellos se suicidó. Hoy en día, los pocos acólitos apristas –que sobreviven– están comenzando a reinventar la historia. Como si hubiera sido prístino e inmaculado. Durante su primer gobierno jodió la economía. Ergo, generaciones enteras huyeron del país, buscando un mejor futuro.

A los 26 años, un 28 de febrero de 1993 emigré del país. En el bus, que viajaba, había 30 pasajeros, de los cuales 28 eran jóvenes. Solo 2 de ellos, iban hacer turismo a la Argentina, eran de Barranco. Mi destino final, era Asunción, pero deseaba conocer Buenos Aires. Mis hermanos mayores me esperaban en Paraguay. En tanto, conversando con los jóvenes, me di cuenta que varios iban a la aventura. Unos no tenían ni donde quedarse. Menos laburo. Otros, decididamente, pactaban –en el momento– que hacer.

  • Ahora, conocí a un pata y nos vamos a la casa de su primo, en Mendoza.

Esas fueron las consecuencias del desastroso gobierno aprista. Se salvó, por un pelo, de un juicio político. Aprovechó que Fujimori lo persiguió y se asiló en la embajada de Colombia. Más tarde, atravesó el charco, y llegó a París.

Empero, volvió el 2001.

  • Porque en el Perú no hay muertos políticos, ¿no?
  • Si pues, pero también porque sus delitos prescribieron.

En el segundo gobierno, siguió la política económica neoliberal imperante. Tiempo después, el conflicto de Bagua hizo su aparición y la declaración polémica.

  • Ellos, no son ciudadanos de primera clase.

Fue la piedra de tropiezo. Juntamente con nuevas acusaciones de corrupción, las cuales lo acompañaron el resto de vida. Odebrecht admitió haberle entregado 4 millones de dólares de coima. El 19 de abril, se quitó la vida para no ir a prisión.

Que la hija, Carla García, tenga un programa en el impresentable Willax, es otra cosa. Habrá gente que le interesará dicha emisión. Perfecto. Vivimos en una democracia. En tanto, declaró lo impensado.

  • No tengo ninguna simpatía por Alejandro Toledo y estoy absolutamente segura que es un total corrupto y estoy de acuerdo que la justicia haga lo que tenga que hacer.

Antes de emitir una declaración de este tipo, el vástago debería verse al espejo. 

  • ¿No lo creen?

DOS

Los seguidores del Chino, desde los noventa, siempre me parecieron fanáticos religiosos. Que lindan entre lo intransigente e intolerante. Como los acólitos de Donald Trump o Bolsonaro. A pesar de la condena que cumple Fujimori, muchos de ellos lo consideran inocente. Incluso, de las matanzas que se le atribuyen. Arguyen lo ilógico.

  • Él no sabía lo que hacía Montesinos.

En aquellos años aciagos, la Iglesia Católica se alineó a su conveniencia.

  • Los derechos humanos son una cojudez.

Alberto Fujimori era demagogo. Y es fácil serlo con dinero en caja. Malvendió gran parte de las empresas públicas.

Décadas después, los dirigentes de Perú Libre son reacios a admitir los crímenes del Autócrata. Eso jamás. La ira de Keiko se derramará sobre los que se atrevan.

Las similitudes con el gobierno de derecha –que nos rige– nos abruman.

  • Traigamos los vouchers, pero también la pena de muerte. Y salgamos de ese adefesio que es la CIDH, con el perdón de los adefesios.

Declaró el, ahora, ex Ministro de Educación.

  • Si pues, parece joda.

Seguramente el ignaro desconocía que, al denostar la CIDH, estaba en concordancia con el pensamiento de Hugo Chávez, a quien tanto desprecia.

Y encima, añadió el mamotreto.

  • Se violan los derechos de los niños, porque tenemos profesores como Pedro Castillo.

El sistema educativo público es el resultado de la desastrosa política chola. Simple nomas.

Ahora, ningún congresista o ministro puede viajar al interior sin ser vilipendiado.

  • Que cosas, ¿no?

Podrán retrasar las Elecciones hasta 2026 si desean. Lo que deben saber es que el futuro Presidente es muy posible que sea un oscuro e ignoto dirigente o un tipo como Antauro. A ninguno de los actuales representantes de la derecha recalcitrante se les elegirá como gobernante.

  • ¿Por qué?

Con su desatinado proceder han ahondado en las abismales diferencias existentes en el Perú.

  • ¿Deseas evitar un nuevo Castillo o Antauro?

Pues gobiernen con equidad y elijan un candidato que se aproxime más al Centro y no a los extremos.

  • Si apoyan la candidatura de Keiko, nuevamente, pues después no se quejen.

TRES

Yo no he corrompido a nadie, ellos ya eran corruptos cuando los conocí.
Marcelo Odebrecht

Sus declaraciones provocaron una eclosión en el universo político. Aseguró que los propios políticos le proponían darle obras, a cambio de un monto que ellos decidían.

  • Toledo me pidió 35 millones de dólares por la Interoceánica y Camisea.
  • Humala se quería hacer el difícil, pero al final aceptó, con las manos abiertas, por la amable sugerencia de su mujer.
  • AG era un hombre honesto, de principios, que jamás se vendería por migajas, solo por millones.
  • La señora K, a cada rato, pedía que le aumenten 500 mil.

Y pensar que el Arq. Fernando Belaunde Terry, a finales de los ochenta, fue a una entrevista a la revista Caretas. Luego de finalizada la misma, salió a la calle. Entonces, la gente lo reconoció y lo comenzaron a saludar con respeto y por el cariño que se había ganado.

  • Esto no ha vuelto a suceder más. Increíble.

Recordemos lo que escribió el respetado periodista Cesar Hildebrandt acerca del ex Presidente.

  • Belaunde no tocó un centavo del tesoro público, no se hizo rico en la presidencia de la República, no se ensució en contabilidades invisibles ni firmó declaraciones juradas plagadas de mentira. Y hoy que la política peruana consagra la impunidad y azuza el saqueo. Hoy es preciso decirles a los jóvenes que la política de este país supo también de gente decente que llegó al poder sin dinero y salió del poder sin dinero. Sin dinero, pero con honor. Y es bueno que lo escriba un periodista que fue implacable con Fernando Belaunde. Un periodista que hoy extraña a rabiar esa perseverancia en el decoro que hoy agiganta su figura.

Tags:

Alan García, Alberto Fujimori, Alejandro Toledo, ex presidente, gobierno del peru, Odebrecht, Ollanta Humala

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